París. El Club de París persigue un financiamiento “sostenible”: El acuerdo de financiamiento EM se ve que plantea riesgos. El miedo a los renovados problemas de deuda en los países más pobres ha llevado al Club de París de acreedores soberanos “ricos” a cumplir con los nuevos prestamistas del mercado por primera vez en un esfuerzo por armonizar los enfoques de financiamiento y reestructuración.
Las dos partes se reunieron en la capital francesa bajo el auspicio del Grupo de 20 principales economías, a pesar de cierta reticencia hacia el club entre los no-miembros.
“El reto es asegurar colectivamente que la forma en que ofrecemos el financiamiento a los países de bajos ingresos no va a ser insostenible en el largo plazo”, dijo Ramón Fernández, director de la Tesorería francesa y presidente del Club de París.
Subyacente a la discusión, celebrada a puerta cerrada, estuvo la preocupación de que los países que se beneficiaron del programa de alivio de la deuda a largo plazo del Club de París para los países pobres muy endeudados (PPME) podrían volver a caer en dificultades dado un nuevo acceso a la financiación barata por parte de prestamistas soberanos y del mercado.
Todos, menos cuatro de los 39 países que se benefician del proyecto HIPC, han completado el proceso con 74 millardos de deuda perdonada hasta la fecha. Sólo nueve de los 35 países siguen marcados por el Club de París como aptos sólo para subvenciones, no para préstamos.
Entre las preocupaciones que están surgiendo está que algunos de los prestamistas del país pueden permitirse préstamos excesivos para aprovechar el comercio bilateral.
“La Unión Soviética solía hacerlo y pagó un precio muy alto”, dijo Sergei Storchak, viceministro de Finanzas ruso que ha sido co-anfitrión de la reunión. Advirtió que “la historia se repite”. Conjuntamente con Fernández en una entrevista con Financial Times, Storchak dijo que “un montón de espacio” se había abierto para “grandes cantidades” de nuevos préstamos y endeudamiento.
Los mercados emergentes están dando una paliza mientras los inversionistas se retiran ante la perspectiva de mayores tasas de interés globales. “No me podía imaginar hace 10 años que algunos beneficiarios de la iniciativa HIPC irían a los mercados de bonos”.
Ahora ellos publican su informe y lo más importante es que tienen la oportunidad de pedir prestado a precios razonables”. La reunión contó con China, la India, México, Turquía y los países árabes del Golfo, con los 19 miembros del Club de París, los cuales incluyen a EEUU, Japón, Australia, Rusia y los países europeos líderes.
Fernández dijo que era posible que todas las partes acordaran los principios para préstamos sostenibles y una reestructuración, pero agregó que esto llevará tiempo. Expresó que era posible para los prestamistas del mercado unirse al Club de París, o sacar el estado de observador, como lo habían hecho Israel, Brasil y Corea del Sur.
“La puerta está abierta, pero es probable que aún se vea en algunos lugares como el club de los países ricos. Unirse a un grupo que tiene este tipo de imagen es una decisión política”. Complicar el asunto es el papel de los acreedores del sector privado, mostrado en la crisis de la deuda griega y el impago de Argentina.