El ambientalista y político Osiris de León negó categóricamente que el desarrollo de la minería sea incompatible con el medio ambiente, como comúnmente se dice, sino todo lo contrario a esas creencias que proliferan sin ningún fundamento.
“No es cierto que la minería de por sí afecte las fuentes de agua potable, si esta se practica respetando las normas ambientales y adoptando los debidos cuidados y medidas precautorias, pues en realidad la minería siempre ha sido la mejor aliada del medio ambiente y de las fuentes de agua”, consideró el experto en la materia.
Estima el ingeniero geólogo que, si la industria minera no hubiese contribuido con la extracción del carbón mineral, el petróleo y el gas natural del subsuelo, ya no nos quedaría bosques, pues la explotación intensiva para obtener leña y el carbón vegetal como fuentes de energía y combustibles para cocinar los alimentos, hubiera llevado la deforestación a un punto crítico.
Otro argumento enarbolado por Osiris de León en favor del apuntalamiento de la minería como factor de progreso y a la vez de cuidado y protección ambiental, es que antes si la minería no aportara gravas, arenas y cementos para la industria de la construcción, los aserraderos seguirían tan campante como antes en la destrucción de nuestras zonas boscosas para obtener madera para la edificación de viviendas.
“Todos los ambientalistas sabemos que entre 1930 y 1960, cuando en República Dominicana no había minería, los aserraderos y la tala para leña y carbón vegetal eliminaron casi el 70% de la cobertura forestal nacional, es decir, eliminaron unos 32,000 kilómetros cuadrados de bosques, equivalentes a 3.2 millones de hectáreas boscosas, sabiendo que con la eliminación de los bosques se reducen las lluvias, y con la reducción de las lluvias se reducen los caudales de los ríos, y al secarse los ríos la gente tiene que migrar a otros territorios con agua”, argumentó de León.
Precisó el experto que no se debe temer a la explotación racional de los recursos mineros, pues se ha hecho siendo que la minería es la única industria que aporta los combustibles y materiales de construcción que han disminuido la depredación de los bosques, garantizando de esta manera los caudales de los ríos que nos abastecen de agua, por lo cual implementaría su desarrollo desde un gobierno comprometido con el progreso y la preservación del medio ambiente, el cual no es excluyente de la minería.