En el marco de la Séptima Conferencia de Microfinanzas de Centroamérica y el Caribe celebrada en el país recientemente, se emitió lo que fue denominada la Declaración de Punta Cana, en la que se hizo un llamado a los gobiernos de la región para que propicien el fomento de las micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes) mediante leyes; mecanismos y alianzas que faciliten los trámites para su formalización; dinamicen el comercio intrarregional, y contribuyan a reducir la corrupción y la especulación.
“Hacemos un llamado a los gobiernos del área que aún muestran un retraso en la aprobación de sus marcos legales y reguladores, a acelerar el diálogo y el entendimiento democrático para la institucionalización de las microfinanzas en sus países, y con ello contribuir al desarrollo y la inclusión financiera, la reducción de la pobreza y la desigualdad de las familias de menores ingresos”, dijo Iván Gutiérrez, Director Ejecutivo de la Red Centroamericana de Microfinanzas (Redcamif).
En los considerandos del documento se advierte que la exclusión financiera y las desigualdades en la distribución de la riqueza fomentaran los movimientos migratorios hacia los centros de oportunidades, lo que obligará a las micros financieras a elaborar estrategias y políticas públicas que guíen la toma de decisiones de cara al futuro.
Se destaca que en el proceso de transformación la superación de la pobreza pasa por la inclusión y el acceso a productos financieros adecuados a la necesidad del cliente.