Pekín. La canciller alemana, Angela Merkel, visitó hoy Hefei, la capital de la provincia china de Anhui (este), patria chica del primer ministro de China, Li Keqiang, con quien puso fin a su viaje oficial de dos días a la potencia asiática, de marcado carácter económico.
Merkel participó en Hefei en un congreso de negocios bilateral, un día después de que los dos países firmaran doce acuerdos de cooperación, entre ellos la compra por parte de aerolíneas chinas de 130 aviones Airbus, una de las mayores adquisiciones de China al consorcio europeo.
La canciller, que el jueves fue recibida por Li en el Gran Palacio del Pueblo de Pekín, la sede del Legislativo, también acudió a la Universidad de Hefei, que fue fundada en conjunto por la provincia de Anhui y el estado alemán de Baja Sajonia en 1984, atendió a escolares e intercambió regalos con el primer ministro.
Mientras ella recibió té verde del monte Huangshang y una pintura típica de la provincia, a su vez entregó al líder chino un marco de porcelana de Alemania y un cómic que ironiza sobre las diferencias entre China y su país, según publica el “Diario del Pueblo».
Merkel subrayó durante el viaje su “confianza” en la evolución de la economía china y aseguró que su país puede continuar siendo un socio de primer orden en la profundización del desarrollo chino.
Aunque su visita -la octava que realiza a China- ha estado sobre todo centrada en lo económico y en estrechar su relación con Li, con quien cenó hoy en Hefei, la canciller también se reunió el jueves con activistas chinos en la embajada alemana en Pekín tras su encuentro con el presidente, Xi Jinping. Xi ha emprendido una dura campaña de represión contra activistas y abogados, entre otros, desde que ocupó la presidencia hace más de dos años, la cual, según organizaciones de derechos humanos, ha empeorado el estado de las libertades en China