No habrá alivio en lo inmediato de la peor racha de caídas del oro en casi dos décadas, según el pronosticador más certero de metales preciosos.

Después de bajar un 1 por ciento desde diciembre, los precios caerán otro 10 por ciento para fin de 2015, llegando a US$1.050 la onza, el nivel más bajo en cinco años, predice Barnabas Gan, economista de Oversea-Chinese Banking Corp. en Singapur.

Gan superó a 19 de sus pares de bancos como Standard Chartered Plc y ABN Amro Bank NV y se convirtió en el analista más certero de los últimos dos años, muestran los datos que reunió Bloomberg Rankings.

El oro bajó durante cuatro trimestres consecutivos, el período más largo desde 1997. Los inversores alcistas que se abalanzaron sobre los productos que cotizan en bolsa (ETP, por sus siglas en inglés) respaldados por el metal, acumulando un récord para fines de 2012, han sufrido más de dos años de desilusiones.

Desde entonces, el valor de los ETP respaldados por lingotes se redujo en más de US$81.700 millones.

Gan, de 33 años, prevé que el lingote seguirá cayendo debido al plan de la Reserva Federal de elevar las tasas de interés.

El aumento de las tasas hace subir el dólar, quitándole atractivo al oro como alternativa. El metal además no paga intereses, a diferencia de otros activos que compiten con él, y la baja inflación significa que hay menos necesidad de esta materia prima como reserva de valor, explicó.

“Las expectativas de que este año haya un aumento de tasas le están dando firmeza al dólar, y un dólar más firme probablemente haga bajar el precio del oro”, dijo Gan. l pronosticador sigue el mercado desde hace cinco años.

Caída de precios. El oro para entrega inmediata bajó 12 por ciento en los últimos doce meses a US$1.172,35, de acuerdo con los precios genéricos de Bloomberg.

Los precios cayeron 0,9 por ciento en los tres meses que terminaron el 30 de junio, después de descender 11 por ciento en los tres trimestres anteriores.

El metal cayó casi 40 por ciento desde que alcanzó un máximo histórico en septiembre de 2011, cuando los bancos centrales del mundo ofrecieron un estímulo económico sin precedentes que alimentó los temores de que el costo de los productos tuviera una fuerte alza.

El precio del lingote está atrapado en un mercado bajista desde hace dos años en tanto la inflación no se aceleró, las acciones estadounidenses llegaron a un récord y el dólar subió.

Gan no es el único que pronostica más bajas. Los analistas de Goldman Sachs Group reiteraron en un informe de mayo que prevén que los precios llegarán a US$1.050 en doce meses. Société Générale SA vaticina que el metal alcanzará ese nivel en el cuarto trimestre de este año, según su informe del 26 de junio.