Estados Unidos atraviesa por el dilema de que aunque el índice de desempleo esté alto a las empresas se les dificulta conseguir mano de obra calificada.
Pero en esto parecen incidir los bajos salarios.
Según un reporte de The Wall Street Journal “es difícil renunciar al ideal de encontrar a un empleado que, además de ser puntual y productivo, esté dispuesto a que le paguen una miseria”. La publicación considera que “mientras el crecimiento salarial no se acelere, como parece ser el caso, las quejas ( de las empresas que dicen no encontrar trabajadores calificados) dejan de tener sentido”.
No obstante, coincidiendo con la presentación de resultados del segundo trimestre, las empresas expresaron su malestar. “Cada vez es más difícil encontrar trabajadores cualificados dispuestos a trabajar con nosotros”, sostiene Steve Rowley, responsable del fabricante y distribuidor de materiales de construcción Eagle Materials.
La publicación de WSJ indica que la escasez de mano de obra y el impacto en los salarios es un asunto prioritario para la Reserva Federal, que coincide además con su inminente cambio de política monetaria. “La dinámica del mercado laboral será uno de los principales temas de la conferencia económica en la que intervendrá este viernes la presidenta de la Fed, Janet Yellen. Un problema para las empresas que lamentan la falta de trabajadores cualificados pudiera ser que la cantera desde donde extraen a muchos de sus empleados, que sólo tienen estudios de grado medio, como mucho, cuenta ahora con menos jóvenes disponibles”, agrega.
“A raíz de la crisis financiera, muchos desempleados optaron por aumentar su formación. El hecho de ver cómo se vieron afectados los trabajadores de sectores como la construcción consolidó esta tendencia. Por tanto, la elevada tasa de desempleo entre los jóvenes menos cualificados pudiera ser inferior de lo que parece. Según los datos oficiales, el índice de desempleo entre los jóvenes de edades comprendidas entre los 25 y 34 años con educación secundaria se mantuvo en el 9,6% en julio. El dato supera a los niveles registrados antes de la crisis, de entre el 6% y el 8%”, afirma.