Troi Orlando Espejo
Especial para HOY/¡Alegría!
Con una sonrisa llena de ingenuidad y acompañada de palabras sinceras, aún muestra su nerviosismo la cantante de música urbana Sarah La Profeta, al contarnos lo que ha significado para ella ser nominada a Premios Soberano 2016, en la categoría de música religiosa contemporánea.
“Me sorprendió mucho la nominación. Significa mucho para mí, pues muestra que se toma en cuenta el trabajo y el esfuerzo que uno puede hacer. Ser reconocida por Acroarte y estar al lado de otros destacados artistas cristianos, solo me hace agachar la cabeza y darle la gloria a Dios por todo”, dijo la joven artista que ha trillado con mucho éxito su carrera de urbana en el sector cristiano.
Sarah La Profeta, quizás digna de más respaldo por la sobrada calidad que demuestra en sus trabajos musicales, no mira los obstáculos y las dificultades que ha tenido que enfrentar nadando contracorriente con canciones cristianas y de corte social, en un mundo del entretenimiento que aplaude más la sensualidad e inmoralidad.
A pesar de esto, la rapera se muestra optimista del futuro y anuncia nuevas propuestas rítmicas para llamar la atención de todo el público. “Me encuentro trabajando mi nuevo disco, donde voy a poner canciones que no son típicas de mi estilo. Por ejemplo, vengo con un tecno, un merengue, una balada y otras sorpresas que me sacan un poco de mi esencia rapera”, explica la artista, que sigue abriéndose paso en el ámbito internacional.
La intérprete de “Vanidad”, uno de sus hits, se declara amante de la música urbana más que todo, por la facilidad que este género le permite para decir las cosas sin maquillaje y directo.
“Uno puede tratar temas de una manera más informal y hablarlo con franqueza a todo el mundo, en especial a la juventud. Es como tener un desahogo en cada canción. Yo voy en contra de todo lo que atente contra la moral, los principios de Dios y las buenas costumbres”, puntualizó la cantante, que además dijo ser una defensora de los derechos de la mujer.
Obstáculos. Aún dentro del ambiente cristiano, como en todo lugar, existen personas que se levantan contra los que deciden hacer algo distinto y Sarah no ha sido la excepción. Ella cuenta como ha tenido que lidiar con sus opositores. “Siempre hay gente que no está de acuerdo que una mujer cristiana cante rap, pero son más los testimonios de gente que ha sido ministrada con una canción, o se han identificado con las letras de mis temas y para mí eso es más valioso que los que se levanten en mi contra; hasta el mismo Jesús tuvo gente contraria a su mensaje. Yo a esos no les hago caso”.
Su historia. La carrera de Sarah La Profeta inició a finales del 2004. Su primer disco llevó por título “Sarah”, el cual la catapultó de inmediato. Más adelante lanzó “Vanidad” con el que se ha mantenido hasta la fecha en el gusto de su público más fiel que son los niños y adolescentes, que en cada concierto cantan a coro con esta artista, que es madre de tres niñas y esposa de Wellington Berroa (también artista cristiano, ex integrante del dúo Ley DC).
Realidad de la música cristiana. Para Sarah La profeta, la música urbana cristiana necesita más apoyo en las emisoras y los eventos. Valoró la iniciativa de la vice presidenta de la República, Margarita Cedeño de Fernández, quien realizó el foro de “Música Urbana Con Valores”, el cual busca que los exponentes de este género en el ámbito secular mejoren sus letras y le den contenido.
“La música cristiana tiene representantes con letras positivas y sanas, pero no se nos da la participación por las empresas que organizan eventos para la juventud. Yo me preocupo por hacer temas de contenido social”, y citó por ejemplo los temas “Vanidad” (que trata sobre altivez y vanagloria), “Qué dolor” (que trata sobre la violación infantil), “Resentimiento” (que trata sobre violencia intrafamiliar), entre otras.
“Creo que el asunto de que las empresas no tomen en cuenta a los artistas cristianos, tiene que ver con el aspecto de beneficios. Tal vez no nos ven como una opción que dé ganancias para el negocio y quizás por eso no nos invitan”, consideró La Profeta. Sarah aprovechó para animar a sus colegas cristianos a no desmayar, en el llamado de cantar temas que contrarresten las tinieblas.