Las acciones de los mercados emergentes están en vías de registrar su peor mes desde noviembre de 2016, pero eso no es necesariamente motivo de desesperación: al menos un indicador técnico sugiere que este es un buen momento para comprar.
El Índice MSCI de Mercados Emergentes ha bajado un 4,4% desde comienzos de febrero, reduciendo la ganancia de este año al 3,5%. Las acciones inmobiliarias e industriales han liderado el declive.
Pero el porcentaje de señales de compra de los miembros del índice es el más alto en más de un año, de acuerdo con su media móvil de convergencia-divergencia (MACD, por su sigla en inglés). La MACD es utilizada por algunos operadores para detectar cambios en el impulso de los valores. Si bien aumentos en las tasas en Estados Unidos pueden hacer que algo de dinero salga de los mercados emergentes, los sólidos indicadores fundamentales de la economía implican que las acciones de los países en desarrollo continuarán con un desempeño superior al de sus pares de países desarrollados, según Prime Partners SA.
“Todavía hay liquidez en el sistema”, dijo François Savary, director de inversiones en Ginebra de Prime Partners.