La nación gala tiene una trayectoria dentro del pensamiento ecológico verde que se ha manifestado en las investigaciones botánicas y naturalistas desde el siglo 19, si nos referimos a Buffon científico naturalista que investigó toda su vida sobre la preservación y la reproducción de las especies vegetales.
Más recientemente en el siglo veinte el ecologista René Dumont dejó por herencia intelectual la idea de una economía justa que tome en cuenta el desarrollo de la lucha contra el hambre y las enseñanzas para los países en vías de desarrollo incitándoles a buscar las formas de autoabastecerse en alimentos.
Varias generaciones a través del mundo alcanzaron el conocimiento de las especies marinas gracias a los reportajes del comandante Cousteau, quien recorrió todos los fondos marítimos para hacer un inventario de las especies en peligro y dar el toque de queda en las situaciones drásticas, como el empobrecimiento de los arrecifes en Haití y algunas islas del océano Índico, como Madagascar y la isla Rodrigo.
El martes 12 de diciembre marcará la historia del siglo 21, por la cita de más de 60 países, representados por sus mandatarios para compartir los giros necesarios a llevar en sus países para frenar el peligro del calentamiento climático.
Frente al desafío de la salida de Estados Unidos del Acuerdo de París, el presidente Emmanuel Macron, con su alegre y convincente juventud, toma las riendas de la lucha climática, convocando a la mayoría de los líderes europeos, en una Cumbre sobre el financiamiento de la transición, pues si el desafío del futuro presente es la ecología, las inversiones financieras de los Estados será decisiva. En este sentido Macron anticipa y ocupa el escenario con razón, ya que si tomamos en cuenta el ritmo actual del calentamiento, a este hay que sumarle un 15 por ciento más de lo previsto, según un estudio de especialistas de California, Estado federal estadounidense que confirma su compromiso y lo asume a pesar del rompimiento de Trump. Los dos gobernadores de California, el ex y el actual, atraen todas la cámaras, en sus paseos en bicicleta por todo París…
Este PlanetSummit nunca hubiese podido ser sin la iniciativa de la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, quién tuvo la justa y visionaria idea de lanzar en 2015 el encuentro de París con un exitoso tratado mundial firmado en ocasión del COP21, donde después de varios días de trabajos 195 países se comprometían en limitar el alza entre 2 y 1.5 grados para el 2100.
El presidente Macron retoma el expediente con el Banco Mundial para darle un nuevo soplo al compromiso, pues queda sobre el tapete la urgencia de reforzar los financiamientos y estimular los compromisos financieros y políticos de todos los Estados que firmaron el Acuerdo de París 2015 y que, en algunos casos demostraron incumplir los artículos firmados en la capital francesa
El presidente Macron se ha remangado y ha decidido, sorprendiendo a muchos que frente al vacío del leadership europeo occidental de Merkel y de May, Francia era capaz de enfrentar el desafío para ofrecer a las futuras generaciones de humanos un planeta en buena salud, pues las amenazas de las energías fósiles siguen siendo un peligro de muerte si los países del G20 siguen financiando más de 46 mil millones de euros que se multiplican por 6 en los gastos para luchar en contra de sus efectos sanitarios…
Es cada día más obvio que la urgencia de lucha climática es también luchar por la preservación de la salud, de todos los seres vivos del planeta, humanos y animales pero también vegetales y marinos. Francia sabe lo que hace y su Presidente también, invertir en el proceso es ahorrar al mediano y largo plazos. En este sentido nadie puede criticar a Macron de imponerle compromiso financiero. Hábil y con un gran conocimiento de la palabra portadora de conciencia y publicidad, tiró su frase eslogan…Acelerar el verdecimiento de la finanza….He aquí una brillante verónica para reorientar los fondos financieros en favor del planeta.
Los países desarrollados ya se han comprometido con 100 mil millones de euros por año a partir del 2020 como ayuda hacia los países más vulnerables y el programa de las Naciones Unidas por el Medio Ambiente recomienda invertir el 2 por ciento del producto interno bruto mundial en la transición de energía. Las voluntades políticas se manifiestan motivadas , entusiasmadas y decididas. Ahora en este Planet Summit el Presidente francés busca las orientaciones de ejecutorias , con programas de acompañamiento financiero preciso.
París se está adelantando, aprovechando el ClimateFinance Day que se organizó también este lunes 11 de diciembre. Es obvio que el contexto favorece la imagen de la ciudad de las luces como la capital de la finanza verde del siglo veintiuno, siendo esto también una manera de adelantarse a Londres enredada en su atormentado Brexit….
Entendemos que hay una auténtica voluntad de las autoridades francesas en esta lucha por salvar el planeta de las amenazas climáticas, algunos ejemplos como el compromiso de la Agencia Francesa de Desarrollo de dedicar el 50 por ciento de sus apoyos y ayudas financieras a proyectos que participan en la lucha contra el cambio climático Vale la pena evocar con positivismo el resultado de inversión de la AFP en el financiamiento de una central solar en las afueras de Ouagadougou, en Burkina Fasso, Africa. Esta central permite la producción del 5 por ciento de la energía necesaria del país restando un costo tres veces inferior al producido por las centrales térmicas de las que dependen la mayoría de los países africanos, Por su capacidad de soleamiento, este pís podría llegar a alcanzar el 100 por ciento de sus requisitos en energía limpia gracias a las placas solares.
Es obvio que estos proyectos llaman una inversión dignificativa de lanzamiento y que la Agencia Francesa de Desarrollo presta con una tasa de intereses bajísima, que de todas maneras significa un capital considerable para los países en vías de desarrollo…Pero también se puede pensar que estas direcciones de economía verde deben animar una educación ciudadana y política, pues por mucho que se invierta siempre es más consecuente invertir en desarrollo de energías limpias que en guerras, enfermedades, contaminaciones bactéricas, epidemias, etc….
Después de dos años día por día, de los acuerdos de París, Anne Hidalgo, alcaldesa parisina, se puede felicitar de las consecuencias positivas de su convocatoria del 2015. En las calles parisinas se siente a pesar del frío un orgullo reencontrado y la juventud en los bistrots, el metro, los buses, habla del talento de Macron en impulsar al mundo político un concepto de finanzas con inversión verde….París será siempre París, atrevida y delantera.