Carmen Heredia de Guerrero 
Las tres salas del Teatro Nacional mantenían una actividad permanente; los espectáculos populares y clásicos se alternaban cada vez con más público.
En enero de 1994 la Academia de Ballet Magda Corbett, con motivo de celebrar su 45 aniversario, presentó en la Sala Principal el ballet “Cenicienta”, teniendo como primera figura a la joven ballerina Michelle Jimenes, y al primer bailarín Armando González, del Ballet Clásico Nacional.
En la Sala Ravelo, la compañía Alta Escena, presenta “El León en Invierno”, obra de James Goldman, protagonizada por Iván García y Margarita Baquero, dirigida por Bienvenido Miranda.
En La Sala de la Cultura continúan las charlas, conferencias y cursos impartidos por don Julio Ravelo, y se extienden a otras manifestaciones del arte, como la comedia musical, la ópera y la zarzuela, a cargo del profesor Antonio Braga.
Los artistas populares cada día tienen más espacio en el Teatro Nacional. En esos años se presentaron entre otros, Azúcar Moreno, Ricardo Arjona, José Luis Perales, Pablo Milanés y los dominicanos Mariadalia Hernández, Julio Sabala, Michel Camilo y Juan Luis Guerra, cuya música fue recreada en un concierto, por la Orquesta Filarmónica de Santo Domingo. Desde el año 1992, los premios “Casandra” fueron entregados en el Teatro Nacional.
Roberto Salcedo Gavilán llevo a la Sala Principal sus comedias “El Seminarista”, “Como odio a mi Jefe” y “Un Intruso en el Cielo”. Los espectáculos infantiles ofrecidos estos años, atrajeron un nuevo público. Basilio Nova presentó en la Sala de la Cultura su Teatro Cucara-Mácara. Nuryn Sanlley -La Pinky- se convirtió en un ícono del teatro infantil, siendo productora y guionista de sus propios espectáculos llevados a la Sala Principal, como “Papolino, donde está Santa Claus”, “El Tesoro de Piyoyo”, “Pinky Piedra”, “La Pinky y la lámpara maravillosa” y “El Bueno el Malo y la Pinky”.
- Manuel Chapuseaux, director del Teatro Gayumba, lleva a la Sala Ravelo, bajo el nombre de “Las Cazadoras el Arca Perdida” un “collage” de obras cortas, cuatro magníficos textos: “Un Bohío” de Juan Bosch, el monólogo “El Nombre” de Griselda Gambaro, el sainete de los hermanos Alvarez Quintero “Morritos” y “El Arca Perdida” de Néstor Caballero”. Todos los segmentos fueron interpretados por la excelente actriz Nives Santana.
“Entre Amigas”, obra del dramaturgo español Santiago Moncada, es llevada a escena y dirigida por Germana Quintana e interpretada por las actrices Lidia Ariza, Amarilis Rodríguez, Niurka Mota, Edilí y Yamilé Scheker.
La Temporada de la Sala Ravelo cerró con broche de oro ese año, con la obra “Mass Appeal”, del norteamericano Bill Davis, bajo el nombre de “Entre Dios y el Diablo”, con las excelentes actuaciones de los actores Iván García y quien además la dirigió, y Osvaldo Añez. Con esta obra iniciaba Producciones D.O.S. su tránsito por el quehacer teatral.
Grandes compañías extrajeras se presentaron en la Sala Principal del Teatro, entre ellos el Ballet Folklórico de Colombia, el grupo musical chino “Han Huang” y los solistas del Ballet Soviético de Kiev.
El paso del tiempo va dejando sus secuelas, las instalaciones del Teatro Nacional con más de veinte años, necesitaban una revisión mayor, para reparar los daños que el paso del tiempo podían haber producido, por lo que se contrató a la reconocida empresa norteamericana Peter Albert, que luego de un estudio riguroso dio las instrucciones pertinentes, las cuales fueron ejecutadas.
En septiembre de 1994 el Ballet Clásico Nacional, presentó su espectáculo “Luces y Sombras” con dos ballets: Punto Dorado” de Irmgard Despradel, y “Sombras” de Guillermo Cordero. El programa incluía además Variaciones del ballet “Majísimo” montaje a cargo de la bailarina y profesora cubana Aida Villoch. El “pas de deux” “Cuando te beso” y “Testamento”, de Guillermo Cordero, en el que participaron como invitadas, Gracielina Olivero y Sonia Silvestre.
Giovanny Cruz presentó en el mes agosto su obra “El Sucesor”, en cuyo argumento se expone un hecho histórico. Fue Protagonizada por Osvaldo Añez y Víctor Vidal, escenografía de José Miura y música de Dante Cucurullo.
El ballet clásico tradicional de Navidad “Cascanueces” -1994-, fue presentado por Ballet Concierto Dominicano, con coreografía de Carlos Veitía, y cuyo principal atractivo era la participación del gran bailarín Fernando Bujones, junto a la bailarina Silvia Crespo.
En 1995, se estrenó en la Sala Ravelo “Diatriba de Amor para un Hombre Sentado”, obra de Gabriel García Márquez, bajo la dirección de Enrique Chao, protagonizada por Edilí, y la participación de Yamilé Scheker.
Uno de los conciertos de la Temporada Sinfónica de ese año -1995- fue dirigido por primera vez por el maestro Francés Philippe Entremont. A partir de entonces sería una figura importante en la historia de la música clásica de nuestro país.
El famoso cuento de Hans Christian Andersen, “La Sirenita”, fue presentado en la Sala Principal, por el centro de Ballet de Clara Elena Ramírez, un hermoso espectáculo infantil en que se fusionaron la danza y el teatro. Participaron los actores Pepito Guerra, Paola Zeller, Patricia Benavides, Gracielina Olivero, Tony Terrero, Patricia Reyes, la “petite” bailarina Lisbel Piedra y una bellísima escenografía de Fidel López.
La Temporada de Teatro de la Sala Ravelo -1995- cerró con la obra “Eréndida”, presentada por el Teatro Gayumba, bajo la dirección de Manuel Chapuseax. La obra es una adaptación del cuento de Gabriel García Márquez “La Increíble y Triste Historia de la Cándida Eréndia y su Abuela Desalmada”.
Participaron las actrices, Nives Santana y Doris Sánchez
En el mes de diciembre se llevó a escena la obra “El Viaje Chino”, de Arturo Rodríguez Fernández, dirigida por Enrique Chao y protagonizada por Carlos Alfredo y Yamilé Scheker.
La Temporada de Teatro 1996, inició con la obra “Picnic”, de Fernando Arrabal, dirigida por Félix Germán. En el mes de abril Enrique Chao presenta “La Soga”, de Patrick Hamilton, drama de suspenso, protagonizada por José Roberto Díaz y Tommy Terrero, acompañados de un elenco de reconocidos actores: Osvaldo Añez, Yamilé Scheker, Pepito Guerra y Lillyana Díaz; la escenografía de Bienvenido Miranda y Federico Pellerano.
La Escuela de ballet Danzarte, dirigida por las primeras bailarinas Marinella Sallent y Thelma García, presentó en la Sala Principal, el ballet “Giselle”, cuyo montaje estuvo a cargo de la profesora Aida Villoch. La joven Sandra Castillo encarnó a Giselle y el personaje de Albrecht, Edwin Silfa, primer bailarín del Ballet Concierto de Puerto Rico, el personaje de Hilarión por Jochi Muñoz. Participaron además Stephanie Bauger, Elvis Guzmán, Yumari Torres y Aniaris López. En el papel de Mirtha, Mary Louise Ventura.
La Temporada de Teatro 1996, cerró con la obra “Juego Mortal”, del dramaturgo inglés Anthony Shaffer, protagonizada por Iván García y Osvaldo Añez, dirigida por el propio Iván García. Los fragmentos musicales escogidos por Eduardo Villanueva, y la escenografía de José Miura, fueron elementos esenciales de esta puesta en escena…
