Los pacientes adultos con cardiopatías deben buscar asistencia del especialista, la sobrevida es muy alta, debido a los avances de la tecnología y calidad de las intervenciones

Los pacientes con cardiopatías congénitas, cuya complicación tiene una incidencia de casi nueve por cada 1,000 habitantes, sobreviven gracias a los avances de la tecnología médica y las estrategias de intervención quirúrgica.

El 90% de estas personas llega a la adultez, lo que ha provocado que en la actualidad la prevalencia de las enfermedades cardiácas ahora sea mayor en la población adulta que en la infantil.

La información la ofreció la doctora Gloria Hermón, fellow de cardiología del equipo del nuevo Servicio de Cardiopatía Congénita en el Adulto de los Centros de Diagnóstico y Medicina Avanzada y de Conferencias Médicas y Telemedicina (CEDIMAT).

Cuidados especializados
Cuando los pacientes con cardiopatías congénitas se acercan a la adultez requieren un cuidado especializado, dijo la médica, quien explicó que los defectos cardíacos se clasifican según la complejidad de su anatomía (reparado o no reparado), en leves, moderados o severos.

En cuanto a las clasificaciones, se dividen según el estado fisiológico, que está basado en la capacidad funcional del paciente y las lesiones hemodinámicas residuales, asegura señala la profesional.

Hermón analiza que las anomalías congénitas cardíacas pueden ir acompañadas de síndromes genéticos, como Down [trisomía 21], de Turner, ausencia o anomalía de uno de los cromosomas X, de Marfan [mutación de la fibrillina-1 o mutación en el cromosoma 15q21], de Noonan de Holt-Oram, entre otros.

Otras complicaciones
Los defectos cardíacos van desde septum interauricular, interventricular, anomalías en las válvulas cardíacas, anillos y membranas supra y subvalvulares, tetralogía de Fallot, cardiopatías con fisiología de ventrículo único. Estas complicaciones, dice la doctora son de alta prevalencia.

Asimismo, la coartación aórtica, ductus arterioso persistente, transposición de grandes arterias, drenaje anómalo de las venas pulmonares y nacimiento anómalo de las arterias coronarias, indica.

El cuidado de esos pacientes se clasifica en tres niveles: los que requieren cuidado exclusivo en un centro especializado, personas que su cuidado puede ser en conjunto y establecido en un servicio de cardiología general apropiado y los que pueden ser manejados en clínicas no especializadas pero con acceso a ese cuidado, de ser requerido, asegura.

La galena refirió que la mayoría de estos adultos ya van a tener procedimientos quirúrgicos correctivos realizados durante la infancia y su estatus clínico va a estar definido por la anatomía del paciente .