Todo organismo necesita agua para vivir y nosotros no somos la excepción. Podemos vivir meses sin comida pero solo unos pocos días sin agua ya que el 50 – 60% de nuestro peso está conformado por agua con funciones para el correcto funcionamiento del organismo, entre las cuales figuran:
- Regula temperatura corporal
- Permite formar secreciones como saliva, lágrimas, sudor y secreciones acuosas en el tracto digestivo
- Sirve para lubricar y mantener protegidos nuestras articulaciones
- Permite disolver diferentes sustancias – minerales y nutrientes – para que sean accesibles al organismo
- Transporta en nuestra sangre nutrientes, oxígeno, dióxido de carbono, desechos para ser eliminados por el sistema renal como también evita la constipación.
Nuestro cuerpo mantiene un control estricto de los niveles de agua utilizando varios sistemas de órganos (como el renal), mecanismos neurológicos y hormonales. Como necesitamos incorporar agua a nuestro cuerpo, cuando perdemos mas agua de lo que ingerimos nos deshidratamos. Esto lo podemos valorar con: sensación de sed, color amarillo oscuro de orina, resequedad de la boca y mucosas. Tener pendiente que en adultos mayores y en ciertas enfermedades estas señales pueden estar alteradas.
La deshidratación puede tener consecuencias negativas como disminución de nuestro rendimiento deportivo, dolor de cabeza, constipación, déficit cognitivo, disminución de función renal, alteraciones de nuestro sistema cardiovascular e incluso predispone al desarrollo de algunas enfermedades crónicas.
Se recomienda ingerir alrededor de 8 vasos por día (64 onzas o 2 litros). Esto varía según sexo, edad, tamaño, actividad física, clima y ropa que use la persona. Es importante tomar agua durante el transcurso del día.
Algunas estrategias:
1) Tomar un vaso de agua al despertarte, antes de principal comidas, durante meriendas, antes de acostarte.
2) Andar con una botella de agua reusable – nos recordará tomar agua a la vez que son ecológicas.
3) Incluir diariamente alimentos con alto contenido de agua (frutas, vegetales, lácteos descremados, te y café en moderación).
En caso de realizar actividad física por mas de 1 hora, puedes tomar bebidas deportivas. Evitar jugos con azúcar añadido, refrescos y bebidas energéticas -esta última además de azúcar contiene mucha cafeína y otros ingredientes no saludables. Hagamos el esfuerzo de consumir más agua a través del día con estas estrategias fáciles para mantener un buen estado de hidratación y salud.
Esta columna es la sección educativa de la Sociedad Dominicana de Nutrición Clínica y Metabolismo. Escribe tus preguntas a sodonuclim@gmail.com y nos puedes encontrar en @sodonuclim.