“Las abejas son criaturas repletas de maravillas:
ni completamente mansas ni tampoco absolutamente salvajes,
sino un poco de ambas cosas, aunque son siempre indómitas,
ya que casi todo lo hacen por instinto.”
Moses Rusden
Según la tradición de los pueblos originarios, los animales de poder nos pueden ayudar a salir adelante en momentos difíciles, inspirarnos en tiempos significativos, acompañarnos en épocas trascendentes, guiarnos para tomar decisiones cuando pasamos por períodos de cambio y protegernos en cualquier circunstancia.
Luego del hombre, la abeja es el ser vivo más estudiado en todos los tiempos. Este pequeño pero poderoso tótem tiene muchas importantes lecciones que enseñar, y será el animal de poder que nos conducirá durante el 2020.
Las abejas simbolizan la elocuencia, la palabra y la inteligencia. En hebreo el nombre de la abeja “Dbure” viene de la raiz “Dbr” que significa “palabra”. Según relata Plinio, el escritor y naturalista latino,las abejas se posaron sobre la boca de Platón cuando era niño como anuncio de “la dulzura de su elocuencia”. También se posaron sobre los labios de San Ambrosio, patrón de los apicultores.
El matemático y filósofo inglés Alfred North Whitehead dijo: “La expresión es el único sacramento fundamental”. La abeja nostrae mensajes de los planos elevados de conciencia, en forma de sueños proféticos y visiones. Además, activa poderes extrasensoriales para que puedan ser usados para la sanación.
En todas las culturas de la Antigüedad, la abeja se ha relacionado con el trabajo y la entrega plena a la tarea que hacemos. De este modo, la abeja promete productividad a las personas que se enfoquen en las acciones del nuevo año. Como nos enseña el tótem abeja, el orden y la capacidad de organización, se traducirá en prosperidaden todos nuestros asuntos.
La energía de la abeja nos brindará gran fortaleza y resistencia para hacer lo que hemos elegido el año 2020. La recomendación para seleccionar tus objetivos y metas de nuevo año es preguntarte: ¿para qué deseo manifestar esto? Si la respuesta no incluye a la comunidad, te costará mucho materializar tus sueños.
La manera en que vemos la vida es un reflejo del modo en que nos vemos a nosotros mismos. “El lenguaje es la casa del ser”, dijo Heidegger.El mundo es lo que decimos que es.Si alguien ve un mundo de violencia y escasez, es porque en su interior eso es lo que hay. Una persona que mira la vida como un campo de amorosas oportunidades, eso es lo que tiene.
Las abejas no atacan, a menos que sientan que la colmena o ellas están en peligro. Al picar mueren, ya que el aguijón se desprende y arrastra parte de su abdomen. Cuando una abeja pica a alguien, es una llamada para despertar y mirar lo que está haciendo con su vida.
La abeja es un excelente aliado para re-encontrar la miel de la vida. El silencioso y milenario trabajo de las abejas consiste principalmente en producir y almacenar el dulce líquido, que extraen del polen de las flores. Antiguamente, la miel era la única fuente de edulcorante. Así, la abeja simboliza la dulzura de la vida.
Debido a que las abejas son el vehículo que transporta el polen de una planta para fertilizar a otra, han sido asociadas con la fertilidad, la abundancia y ¡la prosperidad! Las celdas del panal tienen forma hexagonal y simbolizan la dulzura del corazón, ya que esta figura geométrica resuena con la estrella de seis puntas, simbolo del macrocosmos, de lo divino y de lo espiritual en nosotros.
El Filósofo positivista francés Augusto Comte expresó: “Sólo los buenos sentimientos pueden unirnos, el interés jamás ha forjado uniones duraderas”. La colmena abarca una comunidad perfectamente organizada en roles: reina, obreras y zánganos.El poder que alcanzamos cuando mezclamos nuestros talentos para alcanzar un objetivo común, es inestimable.
La abeja es el símbolo de lograr lo imposible. Todo lo que existe es Luz. La Luz es información. La consciencia es quien detecta, aprovecha y multiplica la Luz. Quien está en el pasado o en el futuro no puede hacerlo, pues la consciencia sólo se manifiesta en el presente.
Los cabalistas dicen que la Luz que está disponible hoy, debe usarse hoy.El consejo de la Abeja es:“Trabaja alegremente y comparte con los demás sin esperar nada a cambio. La mejor recompensa es la alegría de hacer las cosas por el simple gozo de hacerlas”.
El libro de los placeres perdidos dice que necesitamos, más que cualquier cosa, no tanto cantar la canción de la vida como aprender a bailarla.Las abejas se comunican bailando, en una especie de celebración solar, así que en el 2020 una manera de aumentar la energía para crear la vida que soñamos es activarnos mediante la danza y el ritmo.
En el plan simbólico, la abeja simboliza el alma. Quien tiene miedo de perder algo o morir, muestra que ha perdido partes importantes del alma. A estas personas les puede ayudar a estar de nuevo enteros alimentarse con miel o propóleo,una mezcla resinosa obtenida por las abejas de las yemas de los árboles y exudados de savia, y que luego procesan en la colmena como sellante de pequeños huecos y para barnizar todo el interior de la colmena.
El zumbido de la abeja se relaciona con los sonidos que nos llevan al trance. En galés, la palabra para arpa, “tellinn”, es una versión cortada de la palabra para abeja, “an-tseillean”. Existe una respiración de la abeja llamada “Bhramari pranayama”, que es excelente para desarrollar la concentración, aumentar la memoria y reducir el estrés (es también muy buena para los niños).
Consiste en sentarse de forma relajada con la espalda recta. Unos dedos tapan las orejas. Se cierran los ojos. Inspiramos por la nariz y soltamos el aire por la boca haciendo un sonido parecido al zumbido de la abeja (con la letra M nasal). La garganta y los labios vibran. Hay algunas escuelas que practican una variación tapando los ojos.
Si una abeja zumba cerca de alguien, puede estarle recordando que ya que forma parte del ciclo vital del universo, tiene que dar algo a cambio de lo que ha recibido. Es un modo de experienciar la unidad de la vida propia con toda forma de vida, como nos enseña la carta de la estrella en el tarot.
En tiempos de desafíos, es imposible tener un buen vivir desde lo individual. Es igual al principio de reciprocidad andino que conocemos como Ayni: si tomo algo, doy algo a cambio.
En interacciones con la cultura maya, aprendí que en muchas ocasiones lo mejor que podemos dar es una palabra dulce, que extienda el ser de la otra persona. La palabra es medicina. Ninguno de nosotros puede vivir sin el sonido del otro.
El 2020 nos hace un llamado a vivir con responsabilidad y consciencia. Guiarnos por las palabras claves de la abeja nos puede hacer más fácil el camino: limpieza, sencillez, laboriosidad, docilidad, buenos modales, nobleza, generosidad, modestia, laboriosidad, elocuencia, valentía, sabiduría, productividad, organización, concentración, trabajo en equipo, fertilidad, dulzura, celebración, organización, riqueza, cooperación y prosperidad.