Una abuela de Ohio, quien intentaba ser graciosa, compartió en la red social de Facebook fotos que muestran a su nieta con un bobo pegada con cinta adhesiva, así como en un utensilio para hervir papas.
De inmediato, las fotografías recibieron comentarios negativos y provocaron la visita de la Policía y el personal del servicio social a la abuela.
Sheaks explicó a la prensa local que todo “comenzó como una broma” y que lo único que quería hacer era compartir las imágenes con sus amigos en Facebook. Asimismo, aclaró que la cinta solo fue colocada para la foto.
La mujer dijo que nunca le haría daño a la niña y que se trató de un mal entendido.