Atenas. Los representantes de las instituciones acreedoras de Grecia inician hoy en Atenas la primera revisión del tercer rescate, con un amplio catálogo de asuntos todavía pendientes de resolver y un Gobierno frágil que debe capear la protesta de la calle contra el enésimo paquete de recortes.
La primera tanda de conversaciones comenzará a últimas horas de esta tarde, con un primer intercambio de los asuntos que se debatirán a lo largo de los próximos meses. Se espera que los jefes de misión de la Comisión Europea (CE), el Banco Central Europeo (BCE), el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) se queden en esta primera etapa en torno a una semana en Atenas.
Durante este tiempo podrán ser testigos de las ampollas que están levantando las exigencia de la denominada “cuadriga” en materia fiscal y de pensiones, con un paro de los transportes este martes, una huelga general el jueves y las protestas diarias de agricultores.
Si ya la propuesta de reforma del sistema de pensiones presentada por el Gobierno ha desencadenado una reacción ciudadana similar a la vivida durante la coalición de Gobierno entre conservadores y socialdemócratas, las exigencias de los acreedores, que aún van más allá, se intuyen explosivas.
En total son cinco los puntos conflictivos que se tratarán en esta negociación, de cuyo éxito depende que Grecia no solo reciba un nuevo tramo del rescate, sino que pueda tener visos de abrir el debate sobre un posible alivio de la deuda, uno de los principales caballos de batalla del Gobierno de Alexis Tsipras.
El más controvertido en la población es sin duda el que afecta a la reforma de pensiones. El Ejecutivo ha desarrollado una propuesta que pretende evitar nuevos recortes a los actuales pensionistas -desde 2010 ha habido once reducciones-. A cambio, plantea subidas de las cotizaciones y recortes de las pensiones suplementarias, que pese a tener ese nombre, forman el pilar fundamental de los ingresos de los jubilados.
Desde que estalló la crisis hace más de seis años las pensiones se han convertido en el principal sustento de la mayoría de las familias en este país, como refleja un estudio realizado por la asociación de pymes griegas.