Durante 14 años, 560 familias de las comunidades de Monte Grande, La Meseta, San Simón, Los Güiros y Hato Nuevo, en el sur del país, reclaman de manera pacífica el cumplimiento de los acuerdos que incluyen la entrega de 30 tareas de tierra de calidad, con sistema de riego de alta tecnología, asistencia técnica, financiamiento, semillas y mercado seguro sus productos.

Así lo recordó la Coalición Enriquillo, el Centro Lemba de Promoción Campesina y el Comité de Protección y Defensa de las Comunidades Desalojadas por la Presa Montegrande. De igual modo, exigieron los pagos de las deudas acumuladas por la pérdida de sus terrenos, el desbroce de la presa que afectó sus productos y el daño a sus cosechas.

También la ayuda social con un bono equivalente al costo de la canasta familiar para las familias afectadas de la región, retroactivo a enero 2024, así como la inclusión de los envejecientes en el sistema de pensiones del Seguro Nacional de Salud (Senasa).

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Demandaron, además, la instalación de un comedor económico en el centro del poblado de Monte Grande, que supla de alimentos baratos a las familias.

Con la finalidad de que el Gobierno los escuche, una comisión encabezada por Leonardo Mercedes, vocero de Coalición Enriquillo; Manuel A. Pérez, del Centro Lemba de Promición Campesina; Santo E. Ferreras, del Comités Protección y Defensa de las Comunidades Desalojadas por la Presa de Montegrande, entre otros, visitaron a este diario.

Informaron que, sobre estos reclamos, se realizaron tres reuniones con el anterior ministro de la Presidencia, Joel Santos Echavarría; y se han firmado dos acuerdos con las autoridades del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (Indrhi) y el Instituto Agrario Dominicano (IAD).

Sin embargo, las 560 familias a la fecha no tienen dónde trabajar la tierra para generar ingresos que hoy no tienen y la respuesta de las autoridades, desde el presidente hasta el director de la obra, no ha sido más que promesas, mentiras y engaños.

Reconocieron que el Gobierno ha avanzado con la entrega de 390 viviendas amuebladas para las familias desalojadas con luz, agua, calles, aceras y contenes, la construcción de la vía de acceso a Monte Grande, una escuela, el cuartel, la policlínica, el mercado, la iglesia y el acueducto, entre otra obras.

No obstante, las viviendas del Centro Poblado de Monte Grande se están quedando vacías, porque sus moradores tienen que emigrar para buscar medios de vida en otras comunidades, ya que no tienen tierra para trabajar.

Recordaron que desde el Gobierno se anunció la entrega de 10 tareas en Monte Grande, con sistema de riego tecnificado, pero que llevan cuatro años diciendo lo mismo y nunca arranca.