Kabul. Al menos cinco personas murieron, entre ellas cuatro miembros de las fuerzas de seguridad afganas, y seis militares afganos permanecen heridos tras un ataque con coche bomba reivindicado por los talibanes contra una base militar compartida por fuerzas estadounidenses y locales en el este de Afganistán.
“Cuatro miembros de las fuerzas de seguridad afganas murieron y seis civiles resultaron heridos en el ataque, que tuvo lugar contra una base cercana”, dijo a Efe Najibullah Nasari, un portavoz de la Policía de la provincia de Khost, donde tuvo lugar el atentado. El atacante suicida también murió en el atentado, perpetrado con un coche bomba.
El ataque se produjo a las 13.00 hora local (08.30 GMT) contra una base militar compartida por las fuerzas de seguridad afganas y la estadounidense que se encuentra ubicada a seis kilómetros de la ciudad de Khost, capital de la provincia homónima, detalló Mubariz Zadran, portavoz del gobernador de Khost. Los talibanes reivindicaron el ataque a través de un mensaje en la red social Twitter de su portavoz, Zabihullah Mujahid. “Hoy por la tarde una base de las fuerzas afganas de reacción rápida fue completamente destruida en un ataque con coche bomba, decenas de soldados fueron matados y heridos”, escribió Mujahid.
El ataque talibán coincidió con la visita del secretario de Defensa estadounidense, James Mattis, al país asiático y se produjo apenas tres días después de un grave atentado contra una base militar en el que murieron 138 soldados a manos de los talibanes. El atentado de la semana pasada motivó la dimisión también hoy del ministro afgano de Defensa, Abdullah Habibi, y del jefe del Ejército afgano, Qadam Shah Shahim.
El Gobierno afgano ha ido perdiendo terreno ante los talibanes desde el final de la misión militar de la Alianza Atlántica y en este momento apenas controla un 57 % del país, según el inspector especial general para la Reconstrucción de Afganistán (SIGAR) del Congreso de EEUU.