Última parte del excelente escrito del cantante y fotógrafo Roger Zayas sobre la vida y obra de Johnny Ventura. Mis reiteradas gracias permitirme llevar a mis lectores este texto suyo sobre el admirado y querido Padre del Merengue. Veamos:

Su primer traje de saco y corbata se lo regala el cantante Guarionex Aquino, quien era muy fornido y Johnny era un alfeñique. Hizo su primera presentación y le sonaron la campana, estaba muy nervioso. Para su siguiente aparición su madre le entalló el traje y ya no hubo problemas.

En la escuela de la Voz Dominicana estudió canto, música y locución. En esta última estudió con Osvaldo Cepeda, Corporán de Los Santos, Jiménez Maxwell, Juan Nova Ramírez, Pedro Pérez Vargas y José Francisco Peña Gómez, amistad que duró hasta el final de los días del líder político.

Su amistad con Peña Gómez se afianzó cuando el profesor quiso humillar a este último, por sus rasgos físicos, mandándolo a tomar un libro y leerlo en voz alta. El libro estaba escrito en alemán y Peña lo leyó, luego le dijo: «Ese no, el que está al lado» y tomó uno que estaba en francés y también se lo leyó. Así leyó varios en diferentes idiomas, la humillación fue a la inversa.

En el 1957, Atallah Blandino forma la orquesta «Su Majestad» donde Johnny compartía voces con Niní Cáffaro, pero el papá de Niní no quería que fuera cantante y lo sacó de allí.

Su primera orquesta la formó en el 1958, se llamó «El Combo Fuego», antes de eso era solista y cantaba de todo. Esta orquesta duró pocos meses y luego forma «El Combo Candela».

En el 1962, luego de cantar en varios sitios durante unos años, graba su primera producción. Hasta el día de hoy Johnny ha grabado 105 álbumes y está terminando su número 106, un hecho que al parecer no ha sido emulado por nadie, ni siquiera cerca. En estos momentos se están realizando los trámites con el «Guinnes Book of World Records» para el reconocimiento como la persona que más discos ha grabado. Algunos años grabó hasta 3 producciones diferentes.

Johnny es cantante, productor, letrista y arreglista de muchas de sus canciones.

Luego de darse a conocer, volvió a estudiar bachillerato de Filosofía y Letras para estar mejor preparado para su carrera.

Me enteré por él que el pianista de su primera edición del «Combo Show» fue Papito Zayas-Bazán, un primo a quien conocía como pianista de la orquesta de otro grande, Félix del Rosario.

A Johnny se le reconocen la mayoría de los cambios más importantes que ha tenido el merengue en su historia. Siempre innovador, buscaba la forma de mantenerse al día y lo hacía implementando los cambios necesarios para mantener la frescura de su música.

Las orquestas que tocaban para el régimen ganaban más dinero que las demás, a los compositores que escribían merengues para el tirano, el Partido Dominicano le pagaba $500 pesos por composición, por ende, todo el mundo quería escribir para él y así ganar más dinero. Por otro lado, los merengues eran más lentos para que Trujillo los pudiera bailar.

Luego de la muerte del «Chapita», Johnny viene con temas como «La Agarradera», que era mucho más movido porque era lo que sentía en ese momento, saliendo de la tiranía, un cambio radical. También estaban las influencias en el baile del Twist y el Rock n’ Roll, de Elvis Presley, James Brown y más tarde Michael Jackson.

Luego desaceleró el merengue luego de haberlo acelerado. En los años 70s prevalecía la música Hustle y la música Disco y eso era lo que la juventud bailaba en las fiestas. El Caballo fue muy sabio y analizó qué le faltaba al merengue que tenía esa música y así le implementa el Kick, o «bombo». El mismo fue grabado por primera vez con su puño envuelto en una toalla, golpeando una caja de una de las cintas de 2 pulgadas. Incluyó el sintetizador, el cual no existía en los combos, sólo un pianista. Le añadió el bajo eléctrico, que hasta ese momento era acústico, pero al amplificar el resto de los instrumentos, el bajo no se escuchaba.

Rescató las líricas que emulaban las costumbres barriales y de pueblo. Un constante reinventarse lo ha hecho mantenerse por más de 60 años en el gusto del público.

Pasó por el mundo de la política, primero en lo que él mismo llama «Un ensayo», su paso como síndico de la capital y luego como congresista, siendo el único que asistió religiosamente a cada uno de sus compromisos diarios, excepto en una ocasión en que, regresando de Chile, el vuelo de conexión a Santo Domingo fue cancelado y el próximo vuelo hizo que llegara tarde, cuando ya se cerraba la audiencia por falta de quórum. Un verdadero ejemplo de lo que un «Honorable» debe ser.

Lleva 3 matrimonios, pero su matrimonio con su querida Fifa lleva ya 44 años. Padre de 7 hijos, tiene 16 nietos y 2 biznietos los cuales lo hacen sentir vivo y cada día agradecido de su legado. Hay «Venturas» para rato.

Hoy Johnny sigue activo con su orquesta, trabajando de cerca con sus hijos, disfrutando de su renovada juventud, porque a sus casi 75 años de edad, ojalá cualquiera!

Estar frente a él y sentir su abrazo es algo indescriptible y más escucharlo decirle a mi hijo que «debe estar muy orgulloso de mi»…Recójanme!

Siempre lo he admirado desde que empecé a estudiar música. Su trayectoria musical es ejemplar e impecable, su humildad y sencillez de gente es de la pura. Su porte es el de un Rey y, humildemente, para mi, este caballero lleva su realeza y su dominicanidad en el pecho con una gallardía como pocos. Johnny es nuestra bandera del merengue”.