El jardinero de los Reales de Kansas City Alex Gordon, cuya carrera de altibajos le llevó de casi resultar en un fracaso a ser un ‘All-Star’ y ganador del Guante de Oro, anunció el jueves su retiro al final de la temporada.
Gordon fue la segunda selección del draft de 2005, luego de una brillante carrera en la Universidad de Nebraska. Debutó en las mayores dos años después. Al cabo de varias campañas en la que subía y bajaba de las menores, pasó de la tercera base a los jardines, donde finalmente pudo consolidarse.
Terminó cumpliendo toda su carrera de 14 años en Kansas City, emulando a George Brett y Frank White como los únicos jugadores de posición con tanta longevidad en la franquicia.
Rumbo a la serie de cuatro juegos contra Detroit para culminar la campaña, Gordon es el tercero en boletos (682), cuarto en jonrones (190), quinto en dobles (357) y sexto en juegos (1.749) en la historia del club.
Además, el tres veces seleccionado para el Juego de Estrella tiene la singular distinción de ser el pelotero de los Reales con más pelotazos recibidos.
Aunque nunca pudo alcanzar la producción ofensiva que los Reales confiaban que lograría, Gordon se transformó a fuerza de trabajo en uno de los mejores jugadores defensivos de las mayores. Es el único jardinero con siete Guantes de Oro en un lapso de nueve años, una cifra que le deja sólo detrás de los ocho de White por la máxima cantidad en la historia de la franquicia.
Abundan los videos suyos estrellándose contra el muro del Kauffman Stadium o de un tiro para sacar out en el plato.
Gordon ganó el primero de sus tres trofeos al mejor pelotero defensivo en 2014, cuando Kansas City alcanzó la Serie Mundial por primera vez desde el campeonato de 1985. Los Reales perdieron en siete juegos ante San Francisco, pero repitieron al año siguiente y vencieron a los Mets en cinco juegos para coronarse campeones.
Fue en ese Clásico de Otoño de 2015 en el que Gordon bateó uno de los jonrones más icónicos en la historia de los Reales. El batazo contra el cerrador de los Mets Jeurys Familia empató el primer juego y forzó extra innings, con los Reales ganando tras 14 episodios y marcando el tono para el resto de la Serie Mundial.
Gordon firmó por un año para volver esta temporada y nunca consideró darse baja en medio de una pandemia de coronavirus que paralizó al béisbol en la primavera y luego debió abreviarse la temporada regular a 60 juegos.