Un 1ro. de diciembre de 1955, la norteamericana Rosa Parks es encarcelada al negarse a ceder su asiento de autobús a un pasajero blanco en Montgomery, Alabama, Estados Unidos. Esto inició un boicot a los servicios de autobuses liderado por Martin Luther King, que luego de un año de declaraciones y protestas, se logró que se declarara ilegal la segregación racial en el transporte público de la ciudad.

Un día como hoy del 1997, se estrenó la película “Titanic”, considerada la tercera película más exitosa de la historia del cine, luego de Avatar en primer lugar y Vengadores: Endgame en segundo lugar.

El origen de la figura del cascanueces, un soldadito que mueve la boca hecho en madera, típico adorno de Navidad, data del 1870, cuando Wilhelm Friedrich Füchtner, un artesano alemán, talló las primeras figuritas inspirándose en las ilustraciones del libro del cuento “El cascanueces y el rey de los ratones” de Heinrich Hoffmann.

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La leyenda cuenta que el muñeco es un príncipe que se iba a casar con una princesa, pero fue embrujado por una ratona y convertido en un juguete de madera. Su nombre “Cascanueces” viene de la habilidad del príncipe de romper nueces con los dientes.

En 1844, Alejandro Dumas realizó una adaptación infantil de la obra original, la que tituló “Historia de un Cascanueces”, la versión más conocida entre los cuentos navideños.

Esa misma historia inspiraría la obra musical de Piotr Ílich Chaikovski en 1890 y su coreografía en 1891, con las colaboraciones de Marius Petipa y Lev Ivanov. El Cascanueces el ballet, se estrenó el 18 de diciembre de 1892, en el teatro Mariinski, en San Petersburgo, Rusia. Hasta el día de hoy se presenta cada Navidad en los teatros y las salas de conciertos del mundo entero.

En nuestro Teatro Nacional se presentó durante el recién pasado fin de semana.