Paracas, Perú. La Alianza del Pacífico quiere perfilarse como un ejemplo exitoso de integración, expresaron sus miembros al cierre de su X cumbre en Perú, en una región donde otros intentos han quedado estancados comercialmente o atrapados por debates ideológicos.
La proyección internacional de este bloque comercial conformado por Perú, Colombia, México y Chile tiene como eje la afinidad en torno al libre comercio y la democracia para sumar fuerzas y sinergias y ha generado un amplio interés. Cuenta ahora con 42 países observadores.
«La Alianza del Pacífico es un gran motor que dinamiza nuestras economías, es un espacio de oportunidades para los cuatro países para mejorar la calidad de vida», dijo el presidente de Perú, Ollanta Humala, durante la clausura del evento, que se inició la noche del jueves en la bahía de Paracas (260 km al sur de Lima).
«No es un acuerdo de libre comercio avanzado, es un espíritu de integración que no solo mira temas económicos comerciales sino otros temas, como educación y los niveles de pobreza», agregó Humala aludiendo a pares de otros países de la región, como el boliviano Evo Morales, que critican a la Alianza del Pacífico por su apuesta a los acuerdos de libre comercio.
Sumando los productos internos brutos (PBI) totales, la Alianza conforma la octava economía del mundo.
La Alianza, que celebrará su próxima cumbre en Chile en 2016, aceptó este viernes la incorporación de otros 10 países como observadores. Entre ellos figuran Indonesia, Tailandia, Australia, Polonia y Grecia, este último inmerso en una profunda crisis financiera.
Por ahora no se habló de la posible inclusión como miembros plenos a los aspirantes Panamá y Costa Rica. El bloque enfatizó en Paracas la cooperación en los sectores de educación y de pequeñas empresas, como parte del impulso necesario para salir de la pobreza y mejorar la calidad de vida.
Uno de los acuerdos alcanzados ha sido la creación de un Fondo de capitalización para las pequeñas y medianas empresas que funcionará a partir de con el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo y la Corporación Andina de Fomento.
Precisamente el BID pondrá en marcha en 2016 un fondo global de apoyo a Pymes y asociaciones público privadas de unos 2.000 millones de dólares, según dijo en Paracas su presidente, Luis Alberto Moreno. Una parte sería para la Alianza.
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, quien estuvo apenas unas horas en la cumbre el jueves debido a que adelantó su retorno tras dos atentados ocurridos en Bogotá, esbozó claramente el perfil que le gustaría tener a los países de la Alianza.
«Una de las grandes ventajas que tenemos los cuatro países es que compartimos visiones, principios, valores, en materia económica y social. Los cuatro somos de tercera vía: el mercado hasta donde sea posible, el Estado hasta donde sea necesario», dijo Santos ante más de un centenar de empresarios.
«Somos demócratas, creemos en la libertad, en la propiedad privada, en la inversión extranjera, y en ese sentido, si encontramos más y más comunes denominadores, vamos a poder fortalecernos en un mundo más competitivo y más difícil de sobresalir», abundó el colombiano.
La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, al intervenir en la clausura, indicó que «la Alianza del Pacífico es uno de los instrumentos más poderosos y dinámicos de la región y del mundo», y destacó su rápido avance.
Resaltó también la importancia de proyectar al bloque comercial fuera de sus paredes, y mencionó en ese sentido a los países del sudeste asiático y a los del Mercosur. Esa proyección se reforzará a partir del próximo 20 de julio, cuando entre en vigor el Acuerdo Marco de la Alianza, suscrito en 2012 en Chile.
La puesta en marcha del acuerdo marco y de su protocolo adicional, un instrumento concebido para la liberalización de bienes, servicios y capitales, elimina el 92% de los aranceles y el restante 8% lo hará de forma gradual. De esa manera, entre los miembros no existirán barreras arancelarias.
Tampoco será necesaria una visa para el tránsito de sus ciudadanos. Todos ellos tienen tratados de libre comercio con otras 85 naciones. Los cuatro países reúnen 216 millones de habitantes con un Producto Interno Bruto (PIB) de 2,1 billones de dólares, que representa el 37% del total de América Latina.