Por Dr. Luis Felipe Santana/@dr.luissantana

Las personas con cáncer son especialmente susceptibles a padecer de desnutrición. Cerca del 50% reportan pérdida de peso, con un tercio perdiendo más de 5% de su peso habitual y 20% de las muertes en cáncer resultan de caquexia (estado de desnutrición extrema).

La desnutrición es una condición caracterizada por varios síntomas: pérdida de peso (a expensa de masa muscular y grasa), pobre reparación de tejidos o heridas, función inmunológica deprimida y elevado riesgo de morbi-mortalidad.

Tanto la enfermedad como los tratamientos contribuyen al deterioro del estado nutricional, sin embargo, la pérdida de peso influye también en los resultados del tratamiento. Tan solo 6% de pérdida de peso puede predecir un resultado adverso a la terapia, la supervivencia, el desempeño, productividad o calidad de vida. Ambos, la enfermedad y su tratamiento, pueden afectar como se sienten los pacientes con cáncer, su estado de ánimo o su condición física.

Algunas personas pueden presentar:

Pérdida del apetito
Boca, garganta adolorida o seca
Problemas dentales o de encía
Cambios en gusto u olfato
Nausea y/o vómitos
Diarrea o Constipación
Fatiga o cansancio
Depresión

La aparición de síntomas dependerá del tipo de cáncer, la parte del cuerpo afectada, la progresión de la enfermedad y el tipo, dosis y duración del tratamiento. Algunos pueden ser tratados con medicamentos o cambios en la dieta, por lo que se debe estar pendiente para comunicarlo al equipo médico-nutricionista.

Recomendaciones para manejar la desnutrición en cáncer.

Seguimiento multidisciplinario – incluir nutriólogo-nutricionista.
Realizar ejercicio – mejora el ánimo, conserva masa muscular, regula sueño y puede reducir morbi-mortalidad en algunos cánceres.
Monitorear peso, porciento de grasa e índice de masa muscular para detectar cambios en estado nutricional.
Estar pendientes de cambios en patrón de alimentación y evacuación.

Una alimentación equilibrada, suficiente y adecuada, según requerimientos de cada persona, es necesaria para todos y especialmente para personas con cáncer. Las guías de nutrición en cáncer limita la cantidad de grasa, carne roja, azúcar, alcohol y sal a la vez que recomiendan aumentar ingesta de frutas, vegetales y cereales integrales, al igual que mantener un peso saludable. Además de estas recomendaciones, recordar incluir en el equipo de médicos el nutricionista/nutriólogo especialista en el área. Esta columna es la sección educativa de la Sociedad Dominicana de Nutrición Clínica y Metabolismo. Escribe tus preguntas a: sodonuclim@gmail.com / @sodonuclim