El precandidato presidencial del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) Carlos Amarante Baret, envió una misiva al presidente de esa organización, Leonel Fernández, en la que le advierte en detalle la crisis que vendría si continúan sus aspiraciones a la presidencia, además de las consecuencias actuales de su decisión de volver al poder.
En el desarrollo de la carta, fechada el 14 de marzo de 2019, Amarante Beret señala de manera directa las fuerzas reeleccionistas que está desatando ante su expresión: “No hay marcha atrás”, la cual que no se podrán frenar, a menos que no reaccione a tiempo en su decisión de continuar sus aspiraciones.
«Voy inmediatamente al grano: sus deseos de volver a la Presidencia de la República está impulsando, como reacción dialéctica, a un amplio sector del partido a presionar al presidente Medina para que opte por un nuevo mandato presidencial. Este movimiento es evidente», expresa el dirigente político.
Resalta que sería inexplicable ante el país y las futuras generaciones, luego de 20 años de gobierno, «un enfrentamiento entre usted y el presidente
Medina que, evidentemente, entrañaría consecuencias catastróficas para la organización, pero, fundamentalmente, para la estabilidad y desarrollo del país».
«Sé que si usted no opta por la candidatura del partido, los “soplos reeleccionistas” cesarán inmediatamente. Como debe ser. Y como se debe acordar.
¿Es mucho pedirle este sacrificio en aras de la unidad de nuestro partido? Sí» reseña el también miembro del Comité Político del PLD.
A continuación la misiva enviada por Baret a Fernández:
Santo Domingo,
14 de marzo del 2019
Señor
Dr. Leonel Fernández Reyna
Expresidente de la República y presidente del Partido de la Liberación Dominicana (PLD). Sus manos.
Apreciado compañero presidente:
Permítame primero saludarle y reiterarle mi admiración y respeto. He decidido enviarle esta misiva, convencido de que el Partido de la Liberación Dominicana se encuentra en la puerta de uno de sus momentos más difíciles en sus 45 años de historia. Usted, en su condición de expresidente y líder de un sector importante de la organización, es uno de los dos protagonistas que pudieren llevarnos a ese difícil momento.
No creo necesario ahondar en mis aspiraciones y mi procedencia. Al igual que usted, aspiro a ser el candidato presidencial por nuestro partido en las elecciones de mayo del 2020. Además, son conocidos mis estrechos vínculos políticos con el Presidente de la República, Danilo Medina; sin embargo, ello no es un impedimento para escribirle.
Voy inmediatamente al grano: sus deseos de volver a la Presidencia de la República está impulsando, como reacción dialéctica, a un amplio sector del partido a presionar al presidente Medina para que opte por un nuevo mandato presidencial. Este movimiento es evidente.
Usted pudiera contestarme: “compañero Baret, pero yo estoy habilitado constitucionalmente para aspirar, por lo tanto, no me conculque mis derechos”.
Esta respuesta la entendería, mas no la compartiría. Porque si bien es cierto que usted está habilitado, al presidente Medina pudieran tratar de habilitarlo con el consiguiente enfrentamiento y es por ello que apelo a su sentido de trascendencia de la historia.
Su “No hay marcha atrás” está desatando fuerzas que no se podrán frenar. Y aún estamos a tiempo.
Después de 20 años de gobiernos del partido, sería inexplicable ante el país y las futuras generaciones, un enfrentamiento entre usted y el presidente
Medina que, evidentemente, entrañaría consecuencias catastróficas para la organización, pero, fundamentalmente, para la estabilidad y desarrollo del país.
Los peledeistas, pudiera decirse que unánimemente, quieren la unidad del partido. Y el país que hemos estado construyendo en estos casi 20 años de gobierno, pudiera retroceder con la llegada de la oposición al poder.
Dar paso a la improvisación y a la aventura opositora, implicaría estancar el crecimiento económico y la implementación de políticas públicas que sigan promoviendo el desarrollo social del país en un marco de paz, tranquilidad y sosiego.
El ejemplo y admiración que generamos en América Latina y en los organismos económicos mundiales, sería cosa del pasado.
La gran obra política de nuestro líder histórico, el Prof. Juan Bosch, que es el PLD, pudiera colapsar.
A un conocedor de la historia dominicana, como usted, no tengo que explicarle las derivas que han tomado los enfrentamientos entre líderes que han coincidido en tiempo y espacio en un mismo periodo. Hasta ahora, eso no se ha sabido gestionar apropiadamente; al contrario, el “cainismo” ha prevalecido.
A propósito del cainisno, Alfonso Guerra decía en el programa Salvado: “Machado, que era tan sabio, decía que la sombra de Caín recorre España. Aquí siempre ha habido una idea de que el cercano es mayor enemigo que el lejano”.
En una entrevista concedida al periódico El País, Guerra afirmó: “Todos los grandes liderazgos tienen que soportar una presión tremenda: la de los aduladores”.
La cuestión es la siguiente: ¿hasta dónde estaríamos dispuestos a llegar? ¿Al enfrentamiento irracional y total? ¿Prevalecerán los intereses de los seguidores por encima de la visión de nuestros líderes? ¿Es que no hay otra salida? ¿Esto es blanco o negro y punto?
Compañero presidente, si le escribo es porque creo que estamos a tiempo de evitar este enfrentamiento o “choque de trenes”, como se dice.
Sé que si usted no opta por la candidatura del partido, los “soplos reeleccionistas” cesarán inmediatamente. Como debe ser. Y como se debe acordar.
¿Es mucho pedirle este sacrificio en aras de la unidad de nuestro partido? Sí.
Alguien citaba al Premio Nobel de Literatura, Seamus Heaney, diciendo que éste se inspiró en Mandela para escribir el coro más conocido de su poema épico «La Cura en Troya»:
«Los seres humanos sufren, se torturan unos a otros, se hacen daño y se endurecen…La historia dice: No hay esperanza a este lado de la tumba. Pero entonces, una vez en la vida… puede emerger la justicia, y riman la historia y la esperanza».
Tengo la esperanza de que nos veremos en el espejo de la historia dominicana, que no repetiremos los viejos enfrentamientos que han diezmado a otras organizaciones; que promoveremos la renovación del liderazgo, salvaguardaremos la unidad del partido y ganaremos las elecciones del próximo año.
Por eso le he escrito. Atentamente,
Calos Amarante Baret