Loyda Peña 
La falta de un traductor impidió ayer a la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia (SCJ) conocer una solicitud de extradición de un ciudadano estadounidense hecha por las autoridades de Honduras.
El requerido es Gilbert Santiago Reyes, principal sospechoso del asesinato de tres mujeres a la salida de una discoteca en la isla de Roatán, en la bahía del país centroamericano.
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La embajadora de Honduras en el país, Sonia Cruz, agradeció a las autoridades dominicanas “la agilidad y la prontitud con que aceptaron la solicitud de extradición de Reyes.
El tribunal de la SCJ, presidido por el juez Francisco Jerez Mena, aplazó la audiencia para el 20 de mayo, luego de las elecciones congresuales y presidenciales.
