Loyda Peña 
Familiares de las victimas.
Rabia, impotencia y más dolor, fue lo que sintieron ayer los familiares de las cuatro víctimas cuando después de horas de espera el tribunal decidió aplazar, sin fecha fija, la audiencia para conocerle medida de coerción al imputado de asesinar a cuatro personas y herir a un menor, en un hecho ocurrido el pasado sábado en Los Alcarrizos.
“Nosotros queremos que a esta persona, que estaba sana cuando fue a matar a nuestras familias, se le dicte medida ya, y que no nos estén dando vueltas en medio del dolor que estamos pasando”, dijeron los familiares de los fallecidos a la salida del tribunal.
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Y es que esperaron durante horas en la Sala de audiencias de la Oficina de Atención Permanente de Santo Domingo Oeste al agente de la Dirección General de Tránsito Terrestre (Digesett) Esteban Javier Cora, responsable de dar muerte a tiros a su expareja Pamela de la Cruz, de 24 años de edad; a la hermana de esta Indira de la Cruz, de 18; a la madre de ambas Marianelis del Rosario, y a Liran Méndez Báez; y de herir a su hijo menor de 4 años de edad, y nunca llegó.
Fue cuando el Ministerio Público presentó a la jueza Cecilia Toribio una experticia médica justificando la ausencia del imputado, que ella informó su decisión de aplazamiento.
De acuerdo con el certificado médico leído por la magistrada, el agente Cora no pudo ser trasladado al tribunal porque está hospitalizado pendiente a una cirugía en una pierna, la cual se habría herido de bala, involuntariamente, durante la matanza que protagonizó supuestamente por motivos de celos.
El trágico suceso ocurrió la noche del sábado 20 de agosto en el sector Los Coquitos de Los Alcarrizos.
