Llennis Jiménez 
El cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez se encuentra estable, de buen ánimo y desayunó ayer, mientras su equipo de doctores pospuso la cirugía de cadera para la próxima semana.
Esperan el médico especialista y el anestesiólogo en el Centro de Diagnóstico Medicina Avanzada y Telemedicina (Cedimat), donde está recluido, declaró el sacerdote Manuel Ruiz.
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Difundió el mensaje de la evolución del prelado, que sufrió una caída que se le fracturó la cadera, el pasado jueves, en su casa. “Muy buenos días, queridos hermanos, comunicar que la cirugía del cardenal fue pospuesta para la próxima semana, después de una junta médica que se ha hecho”. Agradeció las oraciones y las atenciones que se hacen por la salud de López Rodríguez, de 87 años, quien en el 2020 sufrió una primera caída en su vivienda y la rotura de cadera lo llevó al quirófano. La primera operación de envergadura fue de corazón, en enero del 2007.
Le colocaron un triple bypass. En el 2016, fue operado de las rodillas el ex arzobispo metropolitano de Santo Domingo.
