San Francisco (EEUU).- Los beneficios de Apple cayeron un 27 % durante el tercer trimestre fiscal que finalizó el 25 de junio hasta los 7.800 millones de dólares ante las menores ventas de los teléfonos iPhone, que superaron, con todo, las expectativas de Wall Street.
El gigante tecnológico con sede en Cupertino (California) informó que vendió 40,4 millones de iPhones en el trimestre, comparado con los 47,5 millones del mismo periodo del 2015.
La cifra se situó por encima de las previsiones del consenso de analistas que esperaban ventas de 40,02 millones de unidades, lo que permitió que las acciones de Apple reaccionaran al alza en el periodo de negociación electrónica tras el cierre de Wall Street, con una apreciación de alrededor del 7 %.
La caída de las ventas de los iPhone por segundo trimestre consecutivo propició una contracción del 14,6 % en los ingresos, que totalizaron los 42.360 millones de dólares, frente a los 49.600 millones de dólares del mismo periodo del año anterior. Los beneficios por acción alcanzaron los 1,42 dólares, frente a los 1,85 anteriores.
El consenso de analistas había anticipado ganancias por acción de 1,38 dólares e ingresos de 42.100 millones de dólares. La compañía indicó que su margen bruto de beneficios alcanzó el 38 % en línea con su rango de estimaciones.
“Nos complace anunciar unos resultados del tercer trimestre que reflejan la fuerte demanda de nuestros clientes y un desempeño que ya anticipamos al comienzo del trimestre”, afirmó en un comunicado el consejero delegado de Apple, Tim Cook.
Por su parte, el director general de finanzas de Apple, Luca Maestri, señaló en una conferencia telefónica con analistas que los resultados habían superado sus expectativas en un trimestre marcado por fluctuaciones en los mercados cambiarios y las comparaciones entre el último modelo de iPhone y los superventas iPhone 6 que les precedieron.
Los beneficios de Apple sufrieron la primera caída de los últimos 13 años en el trimestre que acabó el 26 de marzo y las ventas de los teléfonos iPhone se contrajeron entonces por primera vez en la historia, un traspié que interrumpió la meteórica carrera del gigante tecnológico.
Uno de los problemas que afronta el titán de Cupertino es la desaceleración de sus negocios en China, que Apple contempla como su próximo motor de crecimiento.
Las cifras publicadas hoy muestran que las ventas en el país asiático cayeron un 33,1% en el trimestre, comparado con un repunte del 112,4 % en el mismo trimestre del 2015 y tras una contracción del 26 % en el segundo trimestre.
Maestri atribuyó el traspié a factores como la menor fortaleza en la economía china y los altibajos en los mercados de divisas. “Está muy claro que hay señales de ralentización en China y tendremos que hacerles frente”, indicó el ejecutivo, quien aseguró que Apple entiende “bien” el mercado chino y sigue siendo “muy, muy optimista” sobre su futuro en ese país.
Una de las áreas que destacó en el trimestre recién finalizado fue la de servicios, que incluye el App Store y los servicios en la nube (iCloud), entre otros, y que generó ingresos de 6.000 millones de dólares, un 18,9 % más que hace un año.
Por lo demás, Apple espera que su margen de beneficios oscile entre el 37,5 % y el 38 % durante el actual trimestre, que finaliza en septiembre, y adelanta que los ingresos oscilen entre los 45.500 y los 47.500 millones de dólares.
Las acciones de Apple se han depreciado un 8,2 % desde comienzos de año. La sesión de resultados tecnológicos continuará mañana con la publicación de los datos de Facebook, que irán seguidos de los de Alphabet, la matriz de Google, el jueves.