A partir de este domingo 10 de diciembre, el ojo pelao de América Latina está puesto hacia Argentina, país que ha iniciado la Era de Javier Milei, que también será, en materia de la conducción de la política económica, la Era de Luis Caputo.
Después de que Emilio Ocampo convenciera a Milei, antes de que este fuera electo presidente, de que tenía el mejor plan para dolarizar a la Argentina, Caputo le demostró que tenía la mano financiera fuerte que él necesitaba para ejecutar el plan para estabilizar, ordenar y llevar a Argentina a una época de prosperidad.
Y lo ha apostado todo a él, primero designándole ministro de Economía y luego permitiéndole escoger a los integrantes de todo el equipo económico, con profesionales afines, incluido el presidente del Banco Central, Santiago Bausili, su amigo íntimo.
De manera que todo lo que se haga en materia de política económica en Argentina, comprometerá la responsabilidad de Luis Caputo y tendrá su sello, y como sacar a Argentina del precipicio fiscal y del volcán inflacionario en que se encuentra se requiere de una obra apoteósica, el plan que ejecutará Caputo, con el apoyo del presidente Milei, está llamado a ser un referente para América Latina y el mundo.
Y no es para menos, se trata de un país con un déficit fiscal equivalente al 15% del producto interno bruto (PIB) y una inflación que se acercó al 160% en 2023.
El plan económico que ejecutará Caputo no se conoce aún en detalles, pero se sabe que no hará énfasis en la promesa de dolarizar y cerrar el Banco Central que hacía Milei en campaña, sino que se concentrará en el ajuste fiscal para sanear las finanzas públicas, y solo después de eso la dolarización podrá ser un tema de debate.
Y sobre la suerte del Banco Central, mientras Emilio Ocampo decía en broma, cuando era el asesor predilecto de Milei y daba por seguro que iría al Banco Central, que su cargo en el nuevo Gobierno sería el de menos duración, el presidente del Banco Central designado por el ahora presidente de Argentina, Santiago Bausili, ha asegurado: “No cierra el Banco Central. Mientras yo esté ahí, no cierra”.
Y para que quede claro que esta es la onda, tras el equipo económico de Milei haber iniciado las primeras conversaciones con el Fondo Monetario Internacional para la firma de un acuerdo, la portavoz del FMI, Julie Kozack, envió el claro mensaje a los mercados, a dos días del estreno del nuevo Gobierno, de que Argentina necesita un banco central «fuerte y creíble» para hacer frente a la inflación, que forma parte de los desequilibrios macroeconómicos de la nación sudamericana.
De manera que la suerte está echada. Y las calificaciones de Luis Caputo están en juego.