PAMPLONA. La explosión de un cohete marcó el inicio del popular festival de corridas de toros de Pamplona abriendo paso a nueve días de fiestas ininterrumpidas.
Un miembro de la banda de vientos oficial de la ciudad norteña fue escogido este año para lanzar el cohete, conocido como “chupinazo», para celebrar 100 años desde la fundación del grupo musical.
Jesús Garísoain se dirigió al eufórico grupo desde el balcón municipal y gritó: íViva San Fermín!, el santo festejado durante la fiesta. Eso provocó que los juerguistas, vestidos de blanco con el tradicional pañuelo rojo, se rociaran entre ellos con vino.
El novelista estadounidense Ernest Hemingway inmortalizó la fiesta que cada año atrae a aproximadamente 1 millón de visitantes.
Durante ocho mañanas consecutivas a partir del domingo, los valientes corren con toros en un trayecto de 850 metros (930 yardas) en la calle hacia la plaza de toros de la ciudad.