Como era de esperarse, las elecciones presidenciales y congresuales celebradas ayer concitaron un mayor flujo de votantes que en los comicios municipales de febrero. A medida que iban transcurriendo las horas quedaba evidenciado un giro superior de la gente que acudía a las urnas.

Pese a ello, fue una constante escuchar a la gente decir que la expectativa no quedó a la altura de un proceso electoral a nivel presidencial y legislativo que supone una participación más entusiasta.

El proceso fue moderadamente participativo y todo transcurrió en orden. “Ha sido un proceso ejemplar, las personas han tenido toda las facilidades para ejercer su derecho el voto”, aseguró ayer el presidente de la Junta Electoral de Santiago (JES), Haime Thomás Frías Carela.

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Durante el proceso ocurrieron algunos incidentes menores, como el caso de una señora que manoteó a un oficial electoral en el centro del Gran Teatro del Cibao, mientras en otro lugar un ciudadano trató de votar con un documento electoral falso.

Además, en algunos centros comenzaron las votaciones con 15 y 20 minutos de retraso, lo que obedeció a la tardanza en llegar de los funcionarios electorales. En la escuela básica Genaro Pérez, por ejemplo, el proceso comenzó a las 7:20 de la mañana, casi media hora después de lo establecido por la Junta Central Electoral.

Frías Carela destacó el trabajo de los observadores internacionales en algunos centros de votación, quienes dijo, además que resaltaron el rigor del voto penitenciario

Esta vez tampoco faltaron las denuncias de compra de cédulas, así como la supuesta instalación de carpas en las inmediaciones de algunos recintos.

Los candidatos a cargos electivos de los principales partidos ejercieron su derecho al voto en la mañana, incluyendo a la vicepresidenta y aspirante a la misma posición por el Partido Revolucionario Moderno (PRM); Raquel Peña; y el candidato a la Presidencia por el Partido de la Liberación Dominicana (PLD), Abel Martínez.

Se quejan de logística

En algunos barrios de Santiago la queja generalizada de los dirigentes y militantes de la oposición era que la ‘logística’ para el día de las elecciones nunca llegó. Esa, según las versiones, fue la razón por la que muchos decidieron abstenerse de ir a votar.

“Aquí no hubo movimiento de nada (logística) y peor aún, los dirigentes que estaban encargados de esa parte nunca aparecieron”, expresaron desconcertados algunas personas que esperaron hasta el último momento, pero nunca recibieron el apoyo de la alta dirigencia local ni de la nacional.