Persistentes análisis irreales sobre el comportamiento de la economía de China resultan inconsistentes con los resultados reales. No se puede ignorar la fortaleza de los fundamentos de esa economía, su liderazgo comercial global, la capacidad de su clase media, la más grande del mundo, y el poder que ejerce su consumo. Pretender ignorar esas variables lastra la objetividad. Pronósticos enfocados en ideología solo logran resaltar ante el mundo el perfil objetivo de la economía china, su potencial y dinámica. Imposible ignorar se recibieron casi 190 mil millones en Inversión Extranjera Directa.

Al igual que con “soltura” hablaban, y hablan, de que Beijing “solo” creció un 2,1% en 2020, el año fatídico de la pandemia, intentando ignorar que fue la única gran economía que logró crecer; ahora, igualmente, señalan su aumento del PIB en “apenas” 3% pasando por alto, nuevamente, que fue, con mucho, la economía avanzada con mejor resultado. En ambos casos habían anunciado, o deseado, una catástrofe.

El pasado año ante constantes brotes de coronavirus el país insistió en una estrategia de “tolerancia cero” que, al abolirla, la gravedad de la situación generada demostró que, si bien era racional ante la situación particular del país, se hizo socialmente insostenible en el tiempo.

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Comoquiera, obtuvo un resultado envidiable, aunque lejos de sus tasas tradicionales de comportamiento. El presidente Biden, al parecer mal asesorado, había afirmado un mes antes que por primera vez en 40 años la economía norteamericana crecería en 2022 más que la China. No fue así, en tanto Beijing creció 3%, Washington, preliminarmente, según datos oficiales, creció 2,1 por ciento. Cada año en que China supera a EEUU más se acerca a convertirse en primera economía mundial.

Las proyecciones internacionales apuntan que en 2023 China crecerá 5,1% y EEUU 0.2% y en 2024, 5.0% y 1,2% respectivamente. Organismos internacionales, antes de la pandemia, habían vaticinado que en 2030 China pasaría al primer lugar. No es descartable todavía, aunque el prestigiosos Goldman Sachs dice que eso ocurrirá en 2035.

Siguiendo los pronósticos hasta ahora conocidos, en 2021 la economía china representó el 76% de la estadounidense, 17458 miles de millones bajo 22997 la de EEUU; en 2023 pasaría a 82%, 21865, bajo 26695; en 2025 llegaría a 88%, 25353 bajo 28790 y en 2026 el peso sería del 91%, 27174 bajo 29885. La tendencia es clara e indetenible. Nueva realidad mundial que no significa una desgracia.