“Acordaos de la mujer de Lot”. Lucas 17:32.
Jesús hace una exhortación, “Acordaos de la Mujer de Lot”. El Maestro le estaba recordando a sus discípulos, por medio de la mujer de Lot, el precio de mirar atrás, de volver su mente al pasado. Jesús les hizo una alerta a los discípulos, alerta que debemos los creyentes tomarla como ejemplo.
Es un aviso de Jesús para todos nosotros del peligro que significa mirar hacia atrás, y es un llamado de atención a la inutilidad de volver al pasado y buscar revivirlo siempre. La mujer de Lot, hoy puede ser cualquiera de nosotros que busca en lo que pasó la fuerza motora para continuar viviendo una vida amargada, sufrida y engañosa, donde su final es convertirse en estatua de sal; representando el estancamiento, parálisis y muerte.
Sobre la base de esta historia, hoy te comparto tres razones para no mirar atrás:
- Damos lugar y tiempo a la confusión
A que se nuble nuestro futuro, a que nos roben las fuerzas de seguir hacia nuestro destino. Nuestra mente debe estar llena y abastecida de lo que Dios ha dicho que somos y hacia donde debemos ir. Dios tiene planes preciosos para contigo, pero tú tienes que tomar lo que te está tomando a ti, los recuerdos del pasado, y tíralos al olvido por completo. “Despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante”. Hebreos 12:1.
Dios restaurará los años que perdiste (Joel 2:25), tiene un futuro lleno de bendiciones y de paz para ti y los tuyos. Eres una nueva criatura desde que recibiste al Señor en tu corazón. Las cosas viejas pasaron, he aquí todas son hechas nuevas (2 Corintios. 5:17). Camina desde hoy en adelante con tu frente erguida, mirando hacia el futuro, y a las promesas que Dios te ha hecho. Confía en el Señor y el hará (Salmos 37:5).
- Tropezamos con lo que tenemos delante
No nos percatamos de los peligros que pueden venir, no marchamos hacia un destino exacto y permanecemos atrapados en aquellas escenas del pasado. Hasta que no aprendamos a mirar hacia adelante no podremos proyectarnos y continuar el plan que Dios diseño para nuestras vidas.
- Perdemos la bendición de ver cumplido el diseño de vida que Dios nos tiene preparado
Lo que está por delante, nuestro futuro es más poderoso que el pasado. No puedes permitir que aquellas cosas que hiciste, que te hicieron y que atravesaste sean un obstáculo para cumplir el plan que Dios ha trazado para ti. Cuando caminamos mirando hacia atrás, es imposible que como persona nos superemos, crezcamos y maduremos.
Dios ya olvidó lo que tú eras antes de conocerle, hazlo tú también. Él dice en su palabra en Hebreos 10:17: «Nunca más me acordaré de tus pecados e iniquidades”. Tú tienes bendiciones que recibir, no permitas que el enemigo te siga atormentando recordándote tus pecados pasados, Dios ya los tiró a las profundidades del mar (Miqueas 7:19).
“Mira hacia adelante y fija los ojos en lo que está frente a ti”. Proverbios 4:25.
Dios te guarde.
Dios te bendiga.