El politólogo y abogado Belarminio Ramírez Morillo dijo hoy que el liderazgo político de oposición y los intelectuales vinculados a los mismos, están presentando al Partido de la Liberación Dominicana (PLD) como el peor modelo de partidos, pero sin embargo, hasta el momento, ellos han sido incapaces de articular una organización política que carezca de las debilidades que le atribuyen al partido oficialista.
El analista político dijo que los vicios del PLD son inocultables, como también lo son, los vicios de los partidos de oposición.
Lamentó que intelectuales de renombre y prestigio organicen talleres de evaluación de cultura política, y en la nota que se difunde en los medios de comunicación sólo se destaca que utilizaron la palabra “cartel” para tipificar la relación que existe entre el partido oficialista y el ejercicio del poder.
“Es lamentable que la pasión induzca a que el análisis político racional descienda a esos niveles” razonó el escritor y profesor universitario.
Belarminio Ramírez dijo que es necesario construir una democracia más eficiente, una partidocracia más transparente y comprometida con el desarrollo integral, y un Estado Democrático más institucionalizado, pero la oposición política que hay en República Dominicana, ni los académicos que les están sirviendo de sombrilla conceptual, encarnan esa misión.
Ramírez exhortó a los académicos, a que revisen también los esquemas de conductas y culturas políticas imperantes en la sociedad dominicana, cuando los actores políticos que hoy son oposición, gobernaron el país.
El académico puntualizó que hay un desgaste del modelo de partidos y una crisis de la partidocracia en la República Dominicana, y por tanto, el análisis debe ser enfocado a las vulnerabilidades del sistema político y al perfil con ausencia de propósitos sociales que tienen las mayorías de los actores.
Ramírez dijo que los partidos de oposición han sido los más castigados por la población, no porque fueran “santos” ni modelos de buena conducta, cuando gobernaron, sino porque los vicios que hoy les endilgan al PLD, en sus gestiones de gobierno y sus conductas, estuvieron más pronunciados.
El politólogo dijo estar convencido de que lo que mueve a las mayorías de los liderazgos y dirigentes políticos de la oposición, así como a los académicos vinculantes, es la búsqueda del poder, no con el propósito de cambiar modelo, prácticas, ni conductas.
Belarminio Ramírez acotó que si fueran tan puros, como dicen en palabras, en su búsqueda desesperada del poder, no estuvieran articulando un frente opositor consensuando con actores que en el pasado ocuparon funciones públicas y son espejos de corrupción rampante, vagamundería y deshonor.