Río de Janeiro, Brasil. Brasil cerrará 2015 con un déficit de 65.000 millones de dólares en sus transacciones con el exterior, por debajo del saldo rojo de 81.000 millones de dólares inicialmente previsto, según una proyección divulgada hoy por el Banco Central y atribuida a la apreciación del dólar y a la recesión del país.
El organismo emisor informó de que revisó hacia abajo su proyección para el llamado déficit en cuenta corriente este año debido a que, por lo menos hasta agosto, los gastos de Brasil en el exterior no han sido tan altos como se proyectaban.
El déficit en la balanza entre los recursos que Brasil envía al exterior y los que recibe de fuera del país cayó desde 65.248 millones de dólares entre enero y agosto del año pasado hasta 46.148 millones de dólares en los primeros ocho meses de este año, según los datos divulgados hoy por el Banco Central.
El resultado llevó al emisor a reducir su proyección para el déficit en la balanza de cuenta corriente este año en un 37,2 % y calcularlo en 65.000 millones de dólares, el equivalente al 3,71 % del Producto Interior Bruto (PIB), frente al 4,17 % del PIB que preveía.
Brasil cerró el año pasado con un déficit récord en sus transacciones con el exterior de 103.597 millones de dólares, el equivalente al 4,42 % del PIB. El emisor atribuyó la notable mejoría en la balanza de cuenta corriente a la actual recesión de la economía brasileña, que redujo la demanda del país por productos y servicios externos, y a la fuerte depreciación del real frente al dólar, que disminuyó significativamente los gastos de los brasileños en el exterior.
“La tasa de cambio y la débil actividad económica son dos factores que tienen influencia directa en las cuentas externas”, admitió en una rueda de prensa el jefe del Departamento Económico del Banco Central, Tulio Maciel.