ATLANTA. AP. American Airlines siguió cancelando centenares de vuelos ayer y, en un efecto dominó, se presume que los inconvenientes a los pasajeros aumentarán a medida que las inspecciones que provocaron el inconveniente afecten también a otras aerolíneas.
La situación, que ha causado pérdidas financieras y ha agotado la buena voluntad de los pasajeros, asesta un nuevo golpe a una industria golpeada por los elevados costos de los combustibles.
En Washington, un portavoz del presidente George W. Bush estaba al tanto de la situación y vigilándola cuidadosamente. El asunto será discutido el lunes en la reunión del gabinete, dijo el portavoz Scott Stanzel. Algunos legisladores empezaron a formular preguntas y muchos pasajeros cambiaron el avión por el tren. Otros se mostraron más resignados y comprensivos. Si alguien tiene la opción de padecer un accidente de aviación o llegar tarde, ¨qué prefiere?, se preguntó Jane Bernard, una escritora de Nueva York que se vio demorada por lo menos tres horas en un vuelo a Miami. Mingo Valencia, que se quedó varado en Atlanta camino a Midland, Texas, lo atribuyó a mala gerencia de las aerolíneas. El Congreso también intervino el jueves. El funcionario de la Administración Federal de Aviación (FAA) que ordenó las inspecciones de seguridad el mes pasado, Nicholas Sabatini, fue bombardeado a preguntas por un subcomité del Senado sobre la escasa supervisión sobre las aerolíneas y su propia responsabilidad por fallas recientes. La FAA indicó que las aerolíneas tuvieron 18 meses para revisar los cables eléctricos en los jets MD-80.
La cifra
250,000
Pasajeros.Por lo menos 250,000 pasajeros se han visto afectados por las cancelaciones de American esta semana. Alaska Airlines, Midwest Airlines y Delta Air Lines Inc. también cancelaron el jueves algunos de sus vuelos. Las cancelaciones se deben a inspecciones de seguridad.