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SANTIAGO (AFP).- Los candidatos a la Presidencia de Chile, la oficialista Michelle Bachelet y el empresario derechista Sebastián Piñera, se preparaban para el crucial debate televisado que mañana los enfrentará por primera y única vez desde que ambos pasaron al balotaje, que será el 15 de enero.
El debate está programado para las 22H00 horas locales del miércoles (01H00 GMT del jueves) y será transmitido por cuatro canales de la televisión abierta chilena.
Bachelet y Piñera ya se habían enfrentado en dos debates televisados previos a la primera vuelta del 11 de diciembre, cuando alternaron con otros dos candidatos, el derechista Joaquín Lavín, y el izquierdista Tomás Hirsch, apoyado por comunistas y humanistas.
Esta instancia podría inclinar la balanza a favor de uno de los dos candidatos, que se mantienen separados por una estrecha distancia en los sondeos, a menos de dos semanas del balotaje.
En la única encuesta que se conoce tras la primera elección del 11 de diciembre Bachelet se ubica en primer lugar con 42,8% de las intenciones de voto, frente a 37,5% de Piñera. El sondeo fue realizado el 18 de diciembre por el diario El Mercurio.
En la primera vuelta la ex ministra socialista del presidente Ricardo Lagos se impuso con casi 46% de los votos, mientras Piñera llegó segundo con 25,4%.
Ahora el empresario sumaría los votos de quien era el otro aspirante de derecha, el ex alcalde de Santiago Joaquín Lavín, que llegó tercero con 23,2% de los sufragios.
Mientras, Bachelet podría sumar casi la totalidad de la adhesión de la votación de Hirsch, tras el apoyo expreso que le ha dado el Partido Comunista.
Consciente de la importancia del debate, Bachelet pospuso el inicio de una gira por el extremo norte del país para concentrarse en la preparación del encuentro.
Pero al iniciarse el período de propaganda autorizada, que se prolongará hasta la medianoche del 12 de enero, la candidata oficialista criticó la profusión de mensajes de su oponente.
«Encuentro escandaloso, con tanta necesidad en el país, hacer campañas tan millonarias», dijo Bachelet.
«Yo no sé si Michelle es tuerta o no ve bien», replicó Piñera, ante consultas de la prensa, acusándola de tener tanta propaganda como él.
En el debate, según fuentes de su comando, la ex ministra intentará evitar confrontar, y se concentrará en resaltar su carácter amable y su liderazgo, dos puntos fuertemente cuestionados por Piñera.
Bachelet también destacará su preparación académica como médica pediatra y especialista en temas de Defensa, e intentará desnudar una supuesta falta de gobernabilidad de la Alianza derechista opositora en caso de llegar a la Presidencia.
«Vamos a mostrar una mujer que es médico, con beca en Estados Unidos en temas militares, que domina cuatro idiomas además del español», dijo el jefe de su equipo político, Sergio Bitar.
Piñera también preparaba este lunes su asistencia al debate, cuya realización fue el más insistente en solicitar.
La ocasión podría servir para que el empresario dé a conocer un arsenal de medidas para los primeros tres meses de su eventual gobierno, las que intentará confrontar con las propuestas lanzadas hace una semana por Bachelet, a las que consideró de «una pobreza franciscana».
El candidato derechista evitará además entrar en un debate de género con la ex ministra, para no provocar resistencias en el voto femenino, según fuentes de su comando.
Bachelet y Piñera ya debatieron por televisión en otras dos ocasiones, pero este miércoles será la primera vez que lo hagan en solitario tras dejar atrás a Lavín y a Hirsch.
La primera fue el 19 de octubre, en un foro organizado por la cadena estadounidense CNN en el que Bachelet resultó vencedora, según diversos sondeos.
Un mes después Bachelet, Piñera, Lavín y Hirsch volvieron a enfrentarse ante las cámaras en un foro organizado por la Asociación Nacional de Televisión (Anatel), que reúne a los canales abiertos del país.
Tras el foro, Bachelet y Piñera fueron declarados vencedores por distintos sondeos que se realizaron al término de la emisión, que obtuvo una sintonía promedio de 51,8%.
El formato del próximo debate seguirá la misma línea del que organizó la Anatel, con la participación de cuatro periodistas que plantearán preguntas similares a cada candidato.
