Altagracia Ortiz 
Las arritmias son desórdenes de la actividad eléctrica del corazón que conducen a una pérdida del ritmo normal, pudiendo ser rápidas (taquicardias) o lentas (bradicardias).
Se presentan de forma ocasional, así como de forma permanente; por su origen pueden ser originadas en las aurículas o en los ventrículos.
La información la suministró la cardióloga electrodisióloga doctora Elaine Núñez.
Asegura que las arritmias son más comunes de lo que parece y afectan a personas de todas las edades, con un incremento de su incidencia con la edad.
Causa de muertes
Representan la causa más frecuente de muerte súbita en el mundo y la causa más frecuente de consulta cardiológica.
Factores de riesgo
Los factores que se asocian a la presencia de arritmias son afección cardíaca de cualquier origen, antecedentes de infarto de miocardio, insuficiencia cardíaca, hipertensión arterial, muerte súbita en la familia antes de los 50 años.
Otros factores de riesgo son la diabetes, tabaquismo, alteraciones relacionadas con el tiroides, alto consumo de bebidas alcohólicas y café, algunas medicaciones que “aceleran” el ritmo cardíaco y el estrés, analiza la profesional del Centro de Diagnóstico Medicina Avanzada y Telemedicina (Cedimat).
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Síntomas
Las arritmias pueden ocasionar diversos síntomas tales como palpitaciones, ahogo en reposo o con el esfuerzo, dolor de pecho, mareos, pérdida del conocimiento, ansiedad, entre otros. Estas entidades pueden ser banales y dejar graves secuelas neurológicas o incluso pueden causar la muerte, dijo Nuñez.
Hasta en jóvenes
En ocasiones no presentan síntomas y puede manifestarse como muerte repentina o súbita en personas aparentemente jóvenes y saludables.
Muerte súbita
La muerte súbita representa alrededor del 50% de todas las muertes por causa cardiovascular, siendo la mayoría de estas secundarias a arritmias ventriculares, analiza la experta.
Las consecuencias de las arritmias cardíacas dependen de muchos factores, como el estado de energía baja del paciente, de los antecedentes que tenga como enfermedad coronaria o algún grado de afectación cardíaca y de la localización de la arritmias, si son supraventriculares o ventriculares, asegura Núñez
Afortunadamente, el tratamiento de las arritmias cardíacas ha evolucionado notablemente en los últimos años, como muchas otras enfermedades, pueden tratarse por métodos farmacológicos simples, si son benignas o incipientes; pero muchas veces es necesario recurrir a procedimientos invasivos.
Los avances
La experta asegura que debido al desarrollo de la electrofisiología cardíaca, ciertas arritmias se solucionan mediante la ablación por radiofrecuencia o eliminación del foco que las causa, optimizando el éxito terapéutico, con excelentes resultados.
En otros casos, como taquiarritmias, se hace necesario el implante de un dispositivo regulador, como un marcapasos o un desfibrilador automático implantable, éste último con capacidad para tratar arritmias cardíacas.
