Caricom no tiene facultad para nombrar gobierno de transición en Haití afirma dirigente. FOTO FUENTE EXTERNA
La Comunidad del Caribe (Caricom), no tiene falcatas jurídica para conformar un gobierno de transición en Haití, como se propuso en la víspera durante una reunión de emergencia del bloque continental, para tratar la crisis interna en el país caribeño.
Así lo asegura el dirigente haitiano y coordinador de la Mesa Nacional para las Migraciones en la República Dominicana, William Charpentier, quien considera prudente enfocar los esfuerzos en la agilización de una misión de pacificación como primer paso.
Charpentier afirma que esa decisión no es vinculante, ya que constitucionalmente no hay facultades para tomar una medida en ese sentido por parte de un organismo internacional, por lo que la nación queda en inmersa en un vacío de poder.
Incluso, asegura que el propio gobierno del renunciante primer ministro Ariel Henry era ilegítimo, lo que deja un panorama difícil, para resolver la crisis que vive Haiti en la actualidad.
“Es una decisión política, que puede repercutir políticamente en Haití, pero no hay un vínculo jurídico. El mismo primer ministro es ilegítimo, es ilegal; de todos modos cualquier medida que van a tomar deben ser decisiones políticas, para a partir de ahí iniciar un proceso de institucionalización”, afirma Charpentier.
El representante de la diáspora haitiana en República Dominicana entiende que la dimisión y estas decisiones no detendrán la violencia y el caos que atraviesa Haití, por lo que debe iniciar con un plan de erradicación de las pandillas y garantizar la estabilidad social.
“Entendemos que esa decisión de renuncia del primer ministro, no va a papar la violencia, no va a parar la situación de crisis humanitaria que hay en Haití, de lo contrario, primero debe haber una intervención militar para desarticular las bandas y luego nombrar una comisión de transición para organizar elecciones libres y democráticas en Haití”, refiere.
En ese sentido, apuesta por la ejecución de la resolución emitida por la ONU, que da luz verde a una intervención internacional liderada por Kenia y que actualmente está a la espera del financiamiento, para enviar los primeros ejecutivos policiales hacia Puerto Príncipe.
Sin embargo, la tarde de este martes, Nairobi decidió cancelar el envío de la misión, por la falta de garantías de seguridad para sus agentes, tras la renuncia del premier haitiano.