Familiares de la adolescente Esmeralda Richiez, por cuya muerte guarda prisión preventiva el profesor John Kelly Martínez, cambiaron a los abogados anteriores debido a que estos estaban filtrando informaciones sobre el caso.
Así lo dio a conocer este miércoles el nuevo abogado de la familia, Silvestre Rodríguez, quien aseguró que cualquier información que se filtre puede dañar el resultado de la investigación.
«A partir de que se emita la resolución por escrito, a partir de ese momento, el proceso se convierte en secreto. Eso que significa, que las investigaciones están revestidas de un secreto», manifestó a miembros de la prensa.
Además, el jurista negó que se vaya a exhumar los restos de la menor de 16 años, a menos que sea inevitable, según lo conversado con el Ministerio Público.
“Lo primero que la familia quiere es que esa niña descanse en paz, ya que murió de una manera tan trágica y tan violenta, creo que es una responsabilidad nuestra darle un poco de paz y tranquilidad tanto a ella como a su familia”, expresó Silvestre Rodríguez.
Se recuerda que por el caso también recibió medida de coerción, consistente en presentación periódica, Rubiel Morrillo Martínez, primo del imputado, quien enfrenta cargos por su complicidad y fue sometido a la justicia por la violación de los artículos 59, 60, 265, 266, 295, 302 y 331 de dicho código.
Ver: Caso Esmeralda Richiez: Ministra considera educación sexual pudo evitar muerte
La instancia con la solicitud de medida de coerción detalla que John Kelly Martínez, de forma voluntaria, le provocó a la víctima laceraciones, abrasiones y contusiones que le produjeron el deceso debido al desgarro vaginal, con hemorragia aguda severa externa e interna y shock hemorrágico como mecanismo terminal de muerte, según consta en el informe de autopsia.
Respecto al caso, la investigación realizada por el Ministerio Público indica que en horas de la noche del pasado 12 de febrero la adolescente salió desde el hogar donde residía con sus padres en Vista Alegre, en compañía del maestro, así como de Morrillo Martínez y otras tres alumnas menores de edad.
Indica que, al retornar a su hogar, alrededor de las 12:00 de la noche, la joven llegó pálida y sangrando, por lo que sus padres la ayudaron y quedó en su habitación.
Al día siguiente los padres de la adolescente la encontraron muerta en el baño de su residencia.