La jueza Claribel Nivar dispuso ayer que la acusación contra los ocho acusados de lavado de activos vinculados a José Figueroa Agosto sea presentada de manera privada. La prensa fue retirada del tribunal.

Después de ocho horas y media de audiencia, la jueza Claribel Nivar Arias, del Segundo Juzgado de la Instrucción del Distrito Nacional, dispuso ayer que la acusación contra los ocho acusados de lavado de activos y de vincularse al presunto narcotraficante José David Figueroa Agosto sea presentada de manera privada y de inmediato ordenó sacar del salón a todos los periodistas que cubren el caso desde su inicio.

La medida de la jueza se produce debido a un expediente filtrado a los medios de comunicación, con una acusación ventilada, al punto de que se han escrito varias historias señalando los delitos que se atribuyen a los ocho imputados, a Figueroa Agosto y a la madre de la hija de éste, Leavy Nin Batista, ambos en rebeldía.

La magistrada adoptó la decisión, luego de ordenar al Ministerio Público presentar la acusación contra los imputados excluyendo la de Figueroa Agosto, como se lo solicitaron los abogados de la defensa, quienes también le advirtieron a la jueza, por medio de un recurso de oposición, que el nombre del puertorriqueño no podía mencionarse ni vincularse a los hechos que se les atribuyen a los acusados, debido a que está declarado en rebeldía.

Cerca de las 8:00 de la noche, la jueza Nivar Arias dio a conocer su última resolución ultra petita, en la que además propone que la acusación de 300 páginas fuera presentada a esa hora, a puertas cerradas, mandó a sacar a los periodistas que se encontraban en la audiencia desde las 9:00 de la mañana, así como a todos los que no fueran parte del proceso.

En cuanto los abogados se enteraron del espíritu de la medida de la jueza, contentiva de aspectos «más allá de lo pedido», abandonaron la audiencia.

Pero la primera en salir del salón fue la jueza, instruyendo a la seguridad, reforzada con un coronel y dos capitanes, que retornaría cuando estuvieran dadas las condiciones para continuar el proceso.

El rechazo. Los abogados que minutos más tarde regresaron a la audiencia, censuraron la actitud de Nivar Arias, puesto que los periodistas han estado desde el momento mismo de la investigación, allanamientos y apresamiento de los imputados.

Fredy Mateo, defensor de Adolfina Revecca (Dolfi) Peláez Frappier, deploró que la jueza se destape ordenando la audiencia privada, cuando quieren destruir la acusación frente al pueblo.

Consideró que si se pretendía presentar la acusación en privado es porque no vinculan a ninguno de los imputados. Se preguntó qué quiere la jueza que le digan en privado, que el pueblo no se pueda enterar. El abogado de Juan José Ibarra, Marino Elsevif, planteó que esta es una forma de silenciar a la justicia y de coartar el derecho de que la gente se entere de lo que pasa en ese juicio.

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Incidentes

Dos incidentes presentados de diferentes maneras ocuparon ayer todo el juicio. El abogado Ariza encabezó el recurso de oposición, primero para que se aplazara la acusación hasta tanto la Suprema Corte de Justicia falle el recurso, para que decida si la acusación es admisible. El segundo incidente fue para que se rechazara la presentación de la acusación contra Figueroa Agosto. A ésta se unieron todos los abogados.

Falta de respeto

La jueza admitió que la audiencia se caracteriza por los dimes y diretes y los ataques personales entre los abogados y los fiscales.