El Ministerio Público continuó ayer presentando al juez del Tercer Juzgado de la Instrucción Amauris Martínez, el expediente acusatorio contra Jean Alain Rodríguez relacionado con el supuesto desvío de fondos millonarios para su propio provecho y del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), no solamente de la Procuraduría general, sino también del Centro de Exportaciones e Inversiones (CEI-RD), a través de una plataforma política que creó en ambas instituciones con el nombre de “República Digital” y que luego cambio por el de “Movimiento Renovación”.
Según el expediente del caso Medusa, Jean Alain llegó a la PGR el 16 de agosto del 2016 desde el CEI-RD donde fungió como Director Ejecutivo, y “se concentró en formar una estructura política a una escala mucho mayor” con el nombre de Movimiento Renovador, para la cual habría diseñado una estrategia “en la que la vestimenta, discurso, reuniones, visitas, proyectos” se hacían con fines políticos.
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“… nunca antes un Ministro de Justicia o Procurador General había sido tan exitoso como criminal político y había convertido la Procuraduría General de la República en su bunker criminal, utilizando la plataforma institucional, las facultades que le da la ley a su funciones y el patrimonio público como sus herramientas para el crimen y la política con financiamiento ilícito”, afirma el Ministerio Público.
Señala que entre 2016 y 2019, el exprocurador “pagó cientos de millones del presupuesto de la institución” a decenas de asesores para promover su figura política, y utilizó la nómina institucional para designar y captar partidarios de su candidatura en todo el país.
Indicó que Jean Alain “se reunía con el candidato presidencial del PLD Gonzalo Castillo, “quien marcaba las pautas directas” de los eventos del movimiento para recaudación de fondos del partido morado.
Dice que “uno de los recolectores fuertes de la estructura de los sobornos” era Rafael Antonio Mercedes Marte o “el hombre de los sobrecitos” que movía el dinero en las actividades y junto a Rainieri Medina Sánchez, “entregaban la chatica de alcohol que se almacenaban y envasaban en el sótano de la PGR de por instrucciones de Jean Alain y Canó Sacco.
Agrega también que en el CEI-RD se disfrazaban actividades políticas como si fueran institucionales, y que JAR e instruyó al Coordinador de los Servicios Corporativos Víctor Lora Imbert “para que recibiera en sus cuentas fondos desviados para patrocinar el activismo político” de cheques millonarios de los fondos de la institución.