Tras el escándalo de un pastor acusado de abuso sexual de varias menores en el sótano de la Iglesia Libre en Los Alcarrizos, ha despertado en el seno del Congreso Nacional la necesidad de aprobar urgentemente el nuevo Código Penal, sobre todo la figura de la castración química para reducir violaciones y nuevos tipos penales.
A raíz de los referidos abusos sexuales, el senador por la provincia Duarte, Franklin Romero, tronó en la Cámara porque había sometido una pieza legislativa que contempla la castración química, es decir, un tratamiento hormonal voluntario a los sentenciados en agravio por los delitos de violación sexual a menores de edad.
Romero indicó que el proyecto buscar eliminar el lívido, ese síndrome o tendencia de hombres de abusar sexualmente de niños.
De su lado, el presidente del Senado, Ricardo de los Santos se comprometió ante país de trabajar como nunca antes para que se pueda votarse el nuevo Código Penan Dominicano para que esté adaptado a las nuevas realidades de hoy.
En tanto el diputado por Santo Domingo Este, Bertico Santana advirtió que pese a que queda poco tiempo a la actual legislatura entiende necesario se aprueben nuevas iniciativas como el referido dispositivo legal.
Lea aquí: ¿Castrar a violadores de menores? Lectores creen que «es urgente»
Santana pidió que la actual legislatura se extienda hasta el 15 de agosto de modo que los legisladores tengan el tiempo de reintroducir la discusión y aprobar un nuevo Código Penal.
En cambio el diputado por el Partido de la Liberación Dominicana, (PLD), Luis Henríquez, que pese a que la castración química luzca «popular» se mostró a favor de robustecer el sistema de justicia y a los violadores sexuales aplicarle la pena máxima.
Henríquez indicó que el PRM tiene la mayoría necesaria para impulsar el Nuevo Código Penal de modo que es cuestión de «voluntad política» para tener una ley que persiga las nuevas formas del crimen.