CE niega roces con Australia y dice que AstraZeneca tiene un problema global

CE niega roces con Australia y dice que AstraZeneca tiene un problema global

La Comisión Europea (CE) negó este miércoles que tenga problemas diplomáticos con Australia, que ha anunciado que pedirá que se le envíen 3,1 millones de dosis de la vacuna contra el Sars-CoV-2 de AstraZeneca producidas en la UE, y subrayó que el laboratorio anglo-sueco tiene «un problema global» de suministro.

«La UE no es la única región del mundo produciendo la vacunas de AstraZeneca. Esto es un problema global, no un problema bilateral entre un país y la Unión Europea», dijo en rueda de prensa el portavoz jefe de la Comisión Europea, Eric Mamer.

El portavoz se expresó así después de que el Gobierno australiano anunciara este miércoles que pedirá a Bruselas y a AstraZeneca que envíen las vacunas que faltan de la partida de 3,8 millones de dosis contratadas por Sindey en septiembre con el laboratorio.

Australia se ha comprometido a enviar el primer millón de las vacunas que aún faltan por llegar al vecino Papúa Nueva Guinea, que se enfrenta a una grave crisis sanitaria por la Covid-19.

La Comisión no aclaró si se ha rechazado la autorización de exportación de esas dosis, a la espera de «actualizaciones en un futuro cercano».

Se limitó a reiterar que de las 482 peticiones de exportación de dosis desde el 30 de enero hasta el 29 de marzo se ha rechazado sólo una: 250.000 dosis desde Italia hasta Australia, a inicios de marzo.

En cualquier caso, el Ejecutivo comunitario señaló que los procedimientos del mecanismo de control de exportaciones de vacunas son «muy claros» y estipulan que las farmacéuticas deben solicitar los envíos fuera de la UE, y no los Gobiernos de los países receptores, y luego «corresponde a los Estados miembros y la Comisión Europea colectivamente» tomar la decisión.

«No comentamos los contactos que existen entre la CE y distintos actores en lo que se refiere a la distribución de vacunas. Lo importante al final del día son las peticiones formales», señaló Mamer.

Recordó que la brecha entre lo que la compañía acordó con la Comisión y lo que entregó en el primer trimestre a la UE es «extremadamente grande», habiendo suministrado sólo un tercio de lo firmado, y que «la brecha entre lo que se esperaba en el segundo trimestre y lo que AstraZeneca dice ahora que entregará también es extremadamente importante», en torno a un 20 % menos de lo previsto.