Justo a los dos años del establecimiento de las relaciones diplomáticas con China Popular, y de la firma de 18 acuerdos en áreas financiera, comercial, migratoria, agrícola, educativa, turística y aeronavegación, el presidente Luis Abinader anunció ayer que esa nación no podrá invertir en áreas estratégicas como puertos, aeropuertos y las telecomunicaciones.

Fue la gestión de Danilo Medina la que estableció relaciones con China en 2018 luego de romper con Taiwán. Durante su gobierno la propuesta de inversión más importante de los chinos, fue la reconstrucción del estratégico Puerto de Manzanillo, en la costa norte.

Ese interés fue puesto de manifiesto nueva vez en enero por el embajador Zhang Run, quien dijo en una entrevista que la reconstrucción del puerto debe ser con todas las garantías de las reglas del mercado para los países y las empresas interesadas.

Las restricciones para el gigante asiático fueron dadas por Abinader en respuesta a una pregunta de representantes del Wilson Center en una entrevista virtual, sobre las relaciones del país con dos naciones antagónicas China y Estados Unidos.

“Las inversiones de China son bienvenidas. Si ellos quieren inversiones en áreas no estratégicas delpaís, pueden hacerlo”, dijo.

Agregó que que con esos puntos y conceptos ha sido muy claro con el embajador chino y también con la República Dominicana.

“Las áreas estratégicas están bien definidas: puertos, aeropuertos,telecomunicaciones. Estas son áreas que van sobre seguridad del país, a esas me refiero sobre áreas estratégicas para nuestro país”, subrayó.

El gran socio. Respecto a Estados Unidos, reiteró que el país necesita mantener los lazos de cooperación porque además de ser su principal socio comercial, en su suelo residen dos millones de dominicanos.

La entrevista fue coordinada por el Programa Latinoamericano del Wilson Center y la Cámara Americana de Comercio de laRepública Dominicana (AmChamDR), y además de ese tema hablaron sobre los impactos económicos y desalud pública del covid; las perspectivas para la recuperación económica, los planes del gobierno para promover al país, y sobre los desafíos políticos respecto de Haití.

Caso haitianos. El jefe de Estado sostuvo que la situación del vecino país es uno de los principales problemas para el gobierno, difícil de controlar dada la falta de estabilidad y pobreza de Haití.

Indicó que proteger la frontera resulta muy costoso para República Dominicana, ya que debe utilizar alrededor de 7,000 soldados y 800 miembros del Cuerpo Especializado en Seguridad Fronteriza Terrestre.

Explicó que la falta de estabilidad en el vecino país y su pobreza, su estado de crisis y la gente en las calles es una situación difícil de controlar.
Dijo que de forma lamentable el gobierno haitiano no tiene las fuerzas para controlar la situación.

Abinader reiteró la disposición del país de contribuir con Haití, incluso aseguró que podría convertirse en vocero ante otros países de América, Francia, Canadá, para que entre todos implementen un plan de desarrollo para guiar a ese deprimido estado hacia la prosperidad y la democracia.