Artistas de la salsa, el merengue, la balada pop y la música urbana, han visto mermar sus actividades por el
cierre de centros nocturnos que regenteaba César Emilio Peralta
Cantantes y agrupaciones populares han visto mermar sus beneficios económicos con el cierre el mes pasado de las discotecas que regenteaba César Emilio Peralta en distintos puntos de la capital dominicana.
Centros nocturnos como La Kuora y Flow Gallery Lounge en Villa Consuelo, VIP Room en la Zona Universitaria, y Aqua Club y Unlimited Dance Discoteca en Cristo Rey, entre otros, eran escenarios que le daban vida a músicos y artistas y donde la agente iba a divertirse.
Los cantantes urbanos y los salseros han sido los más afectados con el cierre de esos centros de entretenimiento que operaba Peralta, principalmente los que tocaban regularmente en La Kuora, local ubicado en la calle La Guardia número 25 de Villa Consuelo.
Los miércoles fueron de Sergio Vargas por un tiempo en la Terraza de La Kuora, donde también cantaron Los Hermanos Rosario, Wason Brazobán, Toño Rosario y hasta los merengueros del evento “Los años dorados del merengue”.
Algunos llamados “mamberos” tocaban fiestas con frecuencia en el clausurado centro nocturno de Villa Consuelo, entre estos Omega, Ala Jazá, Vakeró, El Sujeto, Tito Swing y Bulin 47.
Las agendas de los periódicos también daban cuenta de las presentaciones en esa discoteca de los más pegados exponentes de la salsa como Yiyo Sarante, David Kada, Sexapeal y la agrupación Chiquito Team Band, entre otros. Además el bachatero Eudis El Invencible.
Después de las jornadas del fin de semana, La Kuora tenía los lunes una concurrida fiesta denominada “Lunes pal’ que puede”, donde regularmente animaban para el público artistas urbanos como La Insuperable, Toxic Crow, Bulova, Musicólogo, Lírico en la Casa, Arcángel la Maravilla”, Secreto y el Mayor.
Esos lunes de música popular donde esa discoteca alternaba artistas de la salsa, el merengue y la música urbana eran la competencia de Jet Set Club, que ahora se ha quedado sola con actividades nocturnas el primer día laborable de la semana.
También han salido beneficiados de estos cierres los centros de entretenimiento que operan en Santo Domingo Este, principalmente en la avenida Venezuela del ensanche Ozama, y que son un lleno total, principalmente los fines de semana.