San José.- Un Tribunal de Costa Rica condenó hoy a cuatro años de cárcel a una pareja costarricense que se dedicaba a traficar personas desde República Dominicana hacia Estados Unidos y Canadá.
La Fiscalía informó que los acusados aceptaron que formaron parte de una organización delictiva dedicada a traficar personas desde República Dominicana a Costa Rica, a través de Nicaragua, y posteriormente proporcionarles pasaportes falsos para que pudieran ingresar vía aérea a Estados Unidos o Canadá.
“La Fiscalía Adjunta contra la Trata de Personas y el Tráfico Ilícito de Migrantes logró demostrar que a finales del 2013, los imputados idearon un plan para gestionar el traslado de una pareja de primos dominicanos, a quienes les cobraron 7.900 y 7.600 dólares para llevarlos hasta el norte del continente”, indica un comunicado.
Estos primos fueron detenidos en el aeropuerto costarricense Juan Santamaría en diciembre del 2013. Uno de ellos colaboró con la Fiscalía para identificar a los sospechosos y facilitar pruebas.
Los sentenciados son Blanca Rubí Rubí y Juan Carlos García Brenes, quienes fueron arrestados en abril de 2015. Rubí era la encargada de contactar a los migrantes ilegales dominicanos que ingresaban a Nicaragua, a quienes les cobraba una suma de dinero con el fin de gestionar su paso ilegal hacia Costa Rica, según la Fiscalía.
“Una vez en suelo costarricense se encargaba de alojar, ocultar y encubrir a los migrantes ilegales en un hotel de la capital. Además les facilitaba documentación falsa, como pasaportes de otras nacionalidades, con la finalidad de promover el tráfico ilícito de migrantes hacia un tercer país”, explicó la Fiscalía.
El papel de García Brenes era el de trasladar en territorio costarricense a los migrantes ilegales y de realizar las diligencias para obtener y confeccionar los documentos falsos, aseguró la fuente.