La constructora Crisfer defendió la calidad constructiva de un proyecto de 240 apartamentos que levantó dentro de la ciudad modelo Juan Bosch y descartó la existencia de vicios de construcción.
La empresa se expresó en estos términos ante una denuncia hecha en televisión por un residente, que presentó espacios de las construcciones que pudieran requerir masillas o intervenciones menores, que en nada tienen que ver con asuntos estructurales.
Señaló que los 15 edificios que componen a Crisfer XV, que se iniciaron su entregas en septiembre de 2017, están compuestos por unidades construidas en hormigón armado y puertas en metal, un sistema constructivo de alta resistencia.
La vocera de la compañía, Vianela de Hernández, explica que “los defectos señalados no se pueden considerar vicios de construcción, sino como áreas terminadas en masilla para efectos decorativos que pudieron ser dañadas adrede”.
Hernández señaló que el condominio tiene un sistema de mantenimiento precario debido a que un “minúsculo grupo no quiere aceptar la compañía administradora para no tener que adherirse a los reglamentos, pagar la cuota de mantenimiento, así como no quieren aceptar el gas común por tuberías” un valor agregado de incuestionable impacto positivo en la calidad de vida de los residentes.
Crisfer Inmobiliaria expresó que los apartamentos se entregaron totalmente terminados y cada adquiriente firmó un acto de entrega después de revisar su vivienda. Indicó que la empresa concede la garantía de reparar cualquier inconveniente que se presente conforme la ley y la política de la empresa.