Pregunta de la lectora: ¿Por qué celebrar la Navidad y Año Nuevo me entristece?

Respuesta de la terapeuta: Algunas personas tienden a asociar estas celebraciones a episodios dolorosos o circunstancias que experimentaron en un momento determinado y de esta época.

Otras personas podrían atravesar por la depresión conocida como estacional, dadas las características propias del cambio que inicia a principios de otoño y de invierno.

Ahora bien, lo importante es buscar apoyo y recibir el tratamiento favorable para mantenerse bajo el cuidado de los especialistas.

Sugiero a las personas tomar en cuenta su forma de pensar y cuáles son las actitudes asumidas de acuerdo con su esquema cognitivo y afectivo, es decir qué tanto tiempo invierten en pensar en situaciones que les provoquen sufrimientos o desesperanzas y que activen el aislamiento.

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Los patrones de pensamiento son rígidos y obsesivos en torno a situaciones negativas, victimismo y la percepción de no sentirse amados y aceptados. Estas personas se muestran hipersensibles en estos tiempos, por lo que muestran actitudes de indiferencia y falta de ánimo ante la alegría de los demás.

La empatía hacia los demás se ve reducida al incrementarse la sensación de tristeza y la disminución de la energía vital.

Estas actitudes disminuyen las hormonas que activan la sensación de felicidad y amor, el espíritu de celebración y de la gratitud. Busque acompañamiento para superar la situación y aprender a celebrar la vida.

Elabore un nuevo propósito de vida. Al lograrlo, notará que esta recobrará un nuevo sentido renovado la sensación de bienestar se incrementará.