Pregunta del lector: ¿Pedir una opinión antes de tomar una decisión es importante?
Respuesta de la terapeuta: Es viable solicitar opiniones con el propósito de escuchar distintos puntos de vista con la finalidad de ampliar su visión, reflexionar y considerar las posibles consecuencias de sus decisiones es viable.
La gran mayoría de las personas opinan en función de sus experiencias particulares, creencias y valores, lo que podría entrar en contradicción con las suyas, y si usted decide en función de lo que alguien más le sugirió, es muy probable que se arrepienta.
¿Por qué puede arrepentirse? Porque su decisión no parte de su propia convicción, de las experiencias personales acumuladas y, sobre todo, es probable que no sea su deseo, sino el del otro.
Puede leer: Consultorio familiar: ¿Un psicólogo puede recomendarme que me divorcie?
Lo interesante es escuchar con humildad, reflexionar cuidadosamente y observar desde su experiencia y sus convicciones qué puede suceder si decide al respecto.
Decidir conlleva inseguridades porque implica salir de la zona de confort, de lo conocido y previsto. Es una reacción natural ante lo que no podemos predecir ni controlar, sin embargo, genera una gran satisfacción reconocerse capaz de hacerlo sin depender de otros.
Hay que tener claro que toda decisión trae consecuencias sobre las que no podemos tener control. Por tal razón, que hay que asumir lo siguiente: Yo decido por mi voluntad y asumo las consecuencias de mis decisiones. No puedo responsabilizar a otros por lo que elegí libremente, reflexionaré y aprenderé de ellas.
Aunque pida una opinión, no descanse su decisión en el enfoque de otros, sino en función de su convicción y principios.