Coronel Rafael Núñez de Aza, el cerebro financiero de la red Coral

Coronel Rafael Núñez de Aza, el cerebro financiero de la red Coral

El expediente de la Procuraduría Especializada de la Persecución a la Corrupción Administrativa describe al coronel Rafael Núñez de Aza como uno de los cerebros financieros del entramado policial-militar societario y religioso encabezado por el general Adams Cáceres Silvestre.

Cáceres Silvestre nombró a Núñez de Aza encargado del Departamento Financiero del Cuerpo de Seguridad Presidencial (CUSEP) con un salario de 70 mil pesos, pero también ocupó simultáneamente el cargo de gerente Financiero del Cuerpo Especializado de Seguridad Turística por 73,517.06 pesos durante los ocho años del gobierno de Medina.

La figura del coronel sale a relucir en la red cuando el general Cáceres Silvestre ya había adquirido dos inmuebles y tenía cinco millones de pesos ahorrado con apenas dos años en el cargo frente al CUSEP. El expediente del Ministerio Público, indica que el alto oficial no podía seguir adquiriendo bienes con ingresos injustificables, y por esto, se asoció con el coronel Núñez de Aza, quien aparte de ser su socio, es financiero y administrador de sus bienes. Juntos pudieron darle un uso discrecional y poco estricto a los fondos que administraba la institución, los cuales ascendieron a unos tres mil millones de pesos en ocho años.

Ascenso vertiginoso

La relación de negocios con el general, permitió que Núñez de Aza ascendiera en las filas del organismo del orden de forma vertiginosa. El oficial ingresó a la Policía Nacional en 2007. El 16 de agosto del 2012 fue promovido al rango de mayor, con menos de 5 meses en el rango de capitán. Posteriormente, en marzo del 2016 fue ascendido a teniente coronel y cuatro años después a coronel, llegando a dicho rango con solo 13 años en las filas. En la actualidad recibe por la Policía Nacional un salario de RD$36,718.79.

“Los imputados Rafael Núñez de Aza y Adán Benoni Cáceres Silvestre colocaron los activos en la banca nacional creando certificados financieros en pesos dominicanos y dólares estadounidenses que le servían de soporte para tomar préstamos que eran pagaderos en tiempo récord sin tocar nunca los valores de los certificados, llamando poderosamente la atención la incongruencia de recibir un aproximado de un 5% anual de intereses por un certificado financiero, mientras que un préstamo en esa misma entidad bancaria paga 20% de interés lo que no es rentable a menos que se esté detrás de una maniobra fraudulenta de lavado de capitales y de esta forma, como experto financiero, obtenía prestamos de forma recurrente, dejando certificados financieros y fondos de inversiones fijos por más de cinco años”, indica el expediente.

La distracción de fondos la realizaban, por ejemplo, con la emisión de cheques de su cuenta bancaria personal a nombre de los otros de los imputados de la red con la finalidad de colocar activos del crimen, como es el caso de los imputados Rossy Maybeline Guzmán Sánchez (a) la Pastora y Tanner Flete Guzmán.

Para la diversificación del activo se constituyeron diferentes compañías: Randa Internacional Company EIRL, CSNA Universo Empresarial SRL y Aldom Glass Alumiminium SRL, por medio de las cuales obtienen otros muebles e inmuebles: vehículos de motor de alta gama, operadores de trabajo, terrenos rurales, villas turísticas, casas suntuosas, entre otras, bajo una sombrilla que le permite ocultar el verdadero origen de los bienes que viene siendo la practica más común en materia de lavado de capitales.

Según el Ministerio Público, la red que encabezaba el general lograba distraer más fondos públicos con las siguientes acciones:

  1. Distracción fondos del Estado a través de personas que figuraban en nóminas públicas sin trabajar y recibían un pago mensual a cambio de ser prestanombres obtener una pequeña suma de dinero y devolver entre el 80 y el 90% de lo cobrado, cada mes para ser distribuido entre los miembros de la organización.
  2. Desviación de fondos que eran para gastos de operaciones de inteligencia, combustible, distribuciones de raciones alimenticias y viáticos presentando gastos ficticios para estafar al Estado Dominicano.
  3. Utilización de organizaciones religiosas como escudo, en una maniobra propia del crimen organizado que busca disfrazar operaciones de lavado de activos millonarias, a través de objetivos nobles, manifestaciones que se repiten desde la Italia marcada por la mafia, como la Colombia golpeada por el narcotráfico y el México de hoy que libra una batalla contra el crimen organizado.
  4. Falsificaron sellos de distintas instituciones públicas como la Contraloría General de la República para darle apariencia lícita a las operaciones que buscaban distraer los fondos del Estado Dominicano.

El organismo advierte que Cáceres Silvestre y su socio Núñez de Aza continúan recibiendo dinero producto de las maniobras fraudulentas. Solicita al Tribunal de Atención Permanente de la Fiscalía del Distrito Nacional la imposición de un año de prisión preventiva contra ellos y los otros tres arrestados por la red Coral.